Yesica Guevara - @yesicaguevara29
Tomás Correa - @toomicorrea
Durante las últimas elecciones, la política de nuestro país – como así también la del mundo – se ha adaptado a la utilización de las redes sociales como una herramienta fundamental de campaña. Ahora ¿de qué manera se diagraman las publicaciones y viralizaciones?
Las elecciones presidenciales del año 2015 presentaron, por primera vez, a las redes sociales como una de los canales de comunicación primarios a la hora de llegar a los vecinos y vecinas de todo el país. A nivel local, las estrategias no se quedaron atrás: publicidades por Facebook, instalación de agenda en Twitter y, como si fuera poco, ciber-militantes.
Como ya vimos en columnas anteriores, este año el Whatsapp – como así Telegram, en menor medida - tomó protagonismo al momento de viralizar y comunicar gestiones, propuestas, y también “chicanas” hacia los otros candidatos o candidatas. Es por eso que nos detendremos en esta red social como generadora de contenido para las demás plataformas.
¿Qué nos lleva a pensar esto? Los grupos masivos de suscripción a nivel nacional son los encargados de facilitar las herramientas y publicaciones a los ciber-militantes. Videos, tweets, publicaciones de Instagram y Facebook para compartir, o simplemente utilización de hashtag son algunas de los mensajes que se pueden ver en cada uno de los grupos.
“Todos Olavarría”
El Frente de Todos en Olavarría tiene varios grupos de Whatsapp con más de 120 personas cada uno. Los grupos son abiertos y las personas ingresan tan solo haciendo click en un link que los propios integrantes envían a sus conocidos.
Los grupos sirven de difusión de videos, información, memes, stickers… además buscan “desmentir” información negativa sobre el espacio y dar a conocer propuestas. Todo esto, tras la intención de obtener la máxima penetración del discurso en la sociedad.
Incluso, se advierte la circulación de contenidos de mayor distención o informalidad, como la posibilidad de armar “tu propio afiche con Alberto” al ingresar al sitio del Frente de Todos.
Ahora bien ¿Se logra ese objetivo?
En principio, se pudo observar una intención por parte de los administradores del grupo de difundir contenido para viralizar. Sin embargo, no se aprecia una reacción unificada ante cada propuesta. El diálogo no se sostiene más allá de dos o tres intervenciones, abundan los emoticones y stickers como respuesta al material.
Entre las consultas que se advirtieron se detecta el malestar por el aumento del valor de las tarifas de servicios públicos, el reparto de boletas, temas particulares y la visualización de algunos integrantes del grupo de distintas acciones solidarias que llevan adelante.
“Juntos por el Cambio”
Quizá Juntos por el Cambio – o ex Cambiemos – a través del conocido manual de Duran Barba haya sido uno de los precursores de la utilización de las redes, como así también de la viralización de contenido como recurso de campaña electoral.
Bajo esa premisa, podemos adentrarnos en los grupos de WhatsApp locales y nacionales. Telegram también es una de las redes utilizadas por el partido al momento de comunicarse con sus “voluntarios”.
En el plano nacional nos encontramos con dos grupos troncales: Defensores del cambio y Defensoras del cambio son los masivos a la hora de pasar información. En ellos podemos encontrar los temas que Juntos por el Cambio se dedica a instalar diariamente en Twitter – como mayor red de difusión -, Instagram y Facebook. Campañas en contra del Frente de Todos, repaso de obras e instalación de hashtag tales como #JuntosSomosImparables son los temas más recurrentes en el grupo de Telegram. ¿El dato? No hay debate, solamente se recibe información.
Si vamos al grupo local nos encontramos solamente con la utilización de WhatsApp: dos grupos con “voluntarios” en los cuales se debate, se definen salidas a folletear, como así también se comparten publicaciones de candidatos y funcionaros en las diversas redes sociales. Al consultar, señalaron que uno de los grupos es el “histórico”, donde confluyen más de 200 personas, mientras que el otro es más nuevo y se encarga de la campaña del 2019.
La pregunta en este espacio coincide con la del Frente de Todos ¿Sirve la utilización de grupos? Podemos decir que en Juntos por el Cambio se ve una respuesta más concreta en la viralización de contenidos. Ahora, cabe destacar también que los “trolls” fueron un recurso utilizado a nivel nacional durante los últimos cuatro años.
Nuevamente, encontramos en la campaña de este Frente la mayor utilización de los recursos que las redes ofrecen: stickers, memes y videos son los más presentes en los diversos planos, tanto local, como así también nacional y provincial.
“Consenso Federal”
El espacio a nivel local plantea una diferencia con los analizados anteriormente. En este caso, incorporan las “listas de difusión”. En Olavarría existe una lista “madre” compuesta por alrededor de 70 personas y donde se vuelca contenido dos veces al día.
A su vez, cada uno de los miembros de esa lista principal tiene sus propias listas de difusión con una rango de contactos que van desde los 20 hasta los 200 en algunos casos.
Sumado a esto, hay un grupo de “comunicación” exclusivo para militantes. Forman parte de este grupo alrededor de 345 personas.
Los contenidos se encuentran segmentados por áreas. Se comparten extractos de entrevistas, notas periodísticas completas y foto de recorridas que no se hacen públicas en los medios de comunicación.
Consultadas fuentes del espacio aseguran que es un “sistema novedoso” y que “funciona muy bien”. Incluso, aseguran que la herramienta permite una respuesta por la persona a la que le llega el contenido, y que en este tiempo de implementación los resultados son “muy buenos”.
A nivel nacional y provincial se repite el mismo esquema, siendo las listas de difusión el principal “caballito de batalla” para difundir los contenidos propios de la campaña.