Este jueves se realizó una charla abierta a la comunidad sobre violencia de género y perspectiva de género. En el encuentro se pudieron abordar distintos ejes vinculados con la temática. Además se profundizó en las razones estructurales de la violencia.
La sede de la Dirección de Políticas de Género ubicada en San Martín 1106 contó con una muy buena participación de mujeres que se acercaron a debatir, repensar y derribar mitos.
La charla estuvo dictada por la licenciada Florencia Caro diplomada en Género e integrante del equipo de Promoción de la Dirección. En un clima distendido, con videos e imágenes proyectados sobre una pantalla, transcurrió el encuentro.
Uno a uno los ejemplos se sucedieron y posibilitaron el reconocimiento de situaciones cotidianas. Mirar. Cambiar el foco. Desempañar el lente. Volver a mirar el entorno y lo que atraviesan las mujeres en lo cotidiano. Repensarnos.
El mate y los conceptos circularon entre las participantes. Desde la definición de sexo y género, pasando por los actos escolares y hasta el papel de los medios en la transmisión de mensajes que sostienen estructuralmente a una sociedad hétero patriarcal.
Los roles que se instalan desde la infancia: los niños como héroes de la revolución, las nenas con tareas de limpieza o cosiendo laboriosamente la bandera. Pocas líneas sobre las mujeres que tuvieron un desempeño activo en la revolución por la independencia. Las mujeres combatieron, pero no aparecen masivamente en los manuales de la Historia que nos inculcaron.
“Hoy elijo ser ama de casa” o “Merezco un amor”. Titulares recientes publicados en medios masivos de comunicación. Las fotos que acompañan esas declaraciones posicionan a las mujeres en el rol de objetos o de servicio.
Mujeres madres que rápidamente “recuperan sus cuerpos” ¿perdidos? ¿olvidados? . Los recuperan para otros: maridos, novios, para la mirada ajena.
“Por celos mató a su esposa y se suicidó”, otro título. La voz de Florencia contundente ante el silencio, ahora, en el ambiente. “Nadie mata por celos. Nadie muere por amor. Mata por violento”.
Afuera el viento se volvió intenso. Adentro las voces continuaron mucho tiempo más para desentrañar imposiciones, buscar de verdad la posibilidad de elegir, tratar de erradicar cualquier tipo de violencia hacia las mujeres. Hacer visible lo que intentaron invisibilizar. Como en la revolución de la independencia, allí, en ese salón, también hay heroínas.