Luciana Pedernera
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Hace casi un mes comenzó el regreso a la presencialidad en las escuelas de la provincia, pero aún hay zonas rurales en la ciudad de Olavarría que no completan sus burbujas debido a la ausencia del transporte que año tras año les otorga el Consejo Escolar.
La Escuela Secundaria Anexo 3031 de Santa Luisa está ubicada a 45 kilómetros de su ciudad cabecera, Olavarría. Tiene una matrícula de 57 estudiantes en sus diferentes burbujas que llegan desde Durañona, zonas aledañas al Paraje El Luchador, Querandíes y Muñoz.
Actualmente la asistencia escolar funciona en tres burbujas que están repartidas por grupo familiar. Sin embargo de estas tres burbujas solo una asiste completa, ya que en las otras algunos chicos tienen habilitado el traslado educativo y otros no.
Cintia Garay, vecina de la localidad y voz representante del resto de las familias, manifestó a este medio que “la situación es preocupante porque las familias no pueden sostener la presencialidad con una asistencia regular por razones económicas, por organización familiar y por el trabajo de sus papas”, en este contexto agregó “hay dos o tres chicos que no están viniendo”.
Actualmente algunos chicos buscan los medios para llegar a la escuela y asistir como corresponde a clases, pero hay otros que no pueden llegar al edificio educativo, motivo por cual reciben las hojas impresas para realizar las tareas.
Este año el consejo escolar debía autorizar el transporte para 45 chicos que tienen enormes distancias por recorrer desde sus hogares, en la zona rural, hasta la escuela. Pero pese a la insistencia de la institución educativa y de los padres, no hay respuesta positiva.
Según informaron a este medio referentes de otras localidades, no es la única institución que esta siendo atravesada por esta problemática.