Matías Nicolás Carberol no se aguantó. Decidió romper la prisión domiciliaria con la que la justicia lo benefició y se fue al Estadio a alentar a Santamarina de Tandil, que el lunes por la noche inauguraba su temporada en la Primera Nacional en condición de local, ante Deportivo Riestra.
Sin embargo, olvidó pasar por boletería y se dispuso a la incómoda tarea de ingresar escalando un paredón lateral del predio, lo que fue advertido por algunos efectivos policiales.
Cuando quisieron identificarlo, emprendió a insultos y golpes contra los uniformados, entendiendo que sería poco probable que pudiera ver el partido.
Al establecerse su identidad, se determinó que el joven de 25 años purgaba prisión domiciliaria.
El sujeto participó en 2017 de un violento asalto a mano armada contra una persona en Colectora Macaya al 1400 y por ese hecho, donde el nombrado contó con dos cómplices, se disparó tres veces contra la víctima, aunque afortunadamente ninguno acertó en el blanco.
El beneficio de la prisión domiciliaria había sido otorgado por el Juzgado de Garantías N° 1 de Tandil, a cargo del Dr. José A. Moragas y tras la detención de este lunes quedó alojado en la Seccional Primera de Policía.
Fuente: ABC Hoy