Tras conocer casos de bancos locales que se negaron a entregar importantes sumas de dinero en pesos por “falta de fondos” de la entidad y la preocupación de empresarios locales que manifestaron una profunda incertidumbre acerca de cómo se procede en este tipo de casos, un choque de normativas y medidas económicas genera confusión en torno a lo sucedido durante esta semana en nuestra ciudad.
Infoeme dialogó con diversas fuentes legales que representan a damnificados y sostuvieron que “no existe normativa del BCRA que indique que un cliente de una entidad bancaria deba informar con antelación suficiente el retiro de montos en pesos disponibles en su cuenta bancaria”. Tampoco “se regula un tope de retiro diario en pesos por ventanilla cuando los fondos están disponibles”.
En los diversos manuales de consulta y reglamentaciones de la cuenta corriente bancaria proporcionados por el Banco Central de nuestro país, se expresa claramente que “no pueden cobrarse por ventanilla cheques por importes superiores a $50.000, salvo que se trate de cheques librados a favor de los titulares de las cuentas sobre las que se giren exclusivamente cuando sean presentados a la entidad depositaria por ellos mismos o de valores a favor de terceros destinados al pago de sueldos y otras retribuciones de carácter habitual por importes que comprendan la nómina salarial en forma global”.
La incertidumbre se genera porque, según se conoció, hubo casos en los cuales las entidades bancarias informaron que “el banco no contaba con esa disponibilidad de dinero y que, por ende, no se permitiría retirar la suma solicitada”.
Fuentes vinculadas a lo técnico en Economía indicaron que para este tipo de operatorias, se debe coordinar una fecha de antelación para poder retirar sumas importantes. De todos modos, no hay normativa que imponga que deba coordinarse cuando se trate de este tipo de extracciones en pesos. El titular de una cuenta podría presentarse en ventanilla, pedir una suma determinada de dinero de su cuenta bancaria, y el Banco debería acceder a entregársela.
Desde lo legal algunos lo considerarían como “una retención indebida de sumas de dinero” pese a que el Banco Central tomó como medida la creación del “encaje bancario”: en pocas palabras, es un porcentaje de dinero que los bancos deben tener guardado y sin utilizar por si los ahorristas se lanzan en masa a sacar la plata en efectivo de sus cuentas. Esto es regulado con el criterio del Banco Central para “acentuar el control de la liquidez en el mercado de dinero, que sigue siendo fundamental para reforzar el compromiso anti inflacionario de la entidad”. En términos más comunes, enfriar la economía con menos dinero en la calle.
Según averiguaciones con personas vinculadas a entidades financieras de la ciudad, prácticamente la totalidad de los bancos se encuentran en una idéntica situación, con poco dinero en efectivo en circulación conforme manda de los niveles jerárquicos de dichas entidades que no “flexibilizan” sus directivas en función de esta situación. En otras palabras, “no inyectan más efectivo en la plaza”.