“Animate” es un grupo de siete personas que trabajan hace ya casi tres años en el acompañamiento de víctimas de abuso sexual, en principio a hacer la denuncia y luego siguen de cerca todo el proceso.
En esta oportunidad eligieron los medios locales para hacer eco del casi un centenar de casos de abusos sexuales cometidos en Olavarría y Loma Negra y de lo "lento" que actúa la Justicia. Liliana Cuenca, referente de la agrupación y demás integrantes hablaron con Infoeme al respecto.
“Hay pedófilos que siguen en la calle, un caso puntual es el de Luciana que el pedófilo fue preso en febrero de este año y el 5 de abril lo sueltan, durante el proceso estuvo libre”, apuntó Cuenca.
Más tarde una joven mamá agregó: “El pedófilo del que habla abusó de mi hija” apuntó la mujer al tiempo que detalló que se trata de “su abuelo paterno, oriundo de Loma Negra. Yo nunca me enteré que estaba libre, me enteré por un vecino” y ahora “tiene que esperar su fecha de juicio en libertad” aunque hasta el momento no hay porque “la Justicia es muy lenta y este caso se suma a los 60 que acompañan desde la agrupación”.
A continuación contó que pidió protección, “no me quieren dar restricción de acercamiento” porque “no sucedió más nada que lo expuesto en la causa”, redondeó.
“Están todas las pruebas” por tal motivo “pudo ir preso” pero sus familiares “hijas y esposa pagaron una fianza para que pueda estar libre y viva como si nada”. Más tarde la referente de la agrupación completó: “El nombre de este señor es Ricardo Rivera”.
Luego hizo referencia a otro caso de abuso de un pedófilo en Loma Negra, de hace cuatro años: “La familia denunció y recibió una notificación que decía que el juicio se llevará a cabo el 9 de agosto del 2018” y mientras tanto el imputado “camina con total libertad por las calles de Loma Negra”.
Otro caso, el tercero, que atendieron recientemente se trata “de un señor pedófilo que abusó de cuatro niños en Loma Negra” y a su vez “tiene una causa abierta en Puerto Madryn por abusar de cuatro menores, uno de ellos discapacitado”.
En esa línea manifestó: “Una de las víctimas fue a jugar a la plaza y lo encontró”, el menor “llegó a su casa en estado de shock”, apuntó sobre uno de los casos que sucedieron en la localidad vecina.
Al tiempo hicieron referencia a otro episodio de abuso que sucedió y se hizo público a principios de este año en nuestra ciudad. Se trata del caso de Rafael y Ramiro Popp, denunciados por abuso sexual. Habló una de las víctimas: “No somos dueñas de caminar libres por la calle. Cruzarlos es paralizante. Uno de ellos continúa trabajando con total normalidad”.
Más tarde continuaban los relatos y llegó el momento del caso de un abusador, con denuncia penal en su contra, que actualmente “trabaja como remis y transporta a menores a los colegios de forma particular. Se llama Carlos “Clavito” Salías” y en esa línea otra integrante expuso: “Mis hijas fueron abusadas por su abuelo, que está preso" aunque "durante mucho tiempo estuvo protegido por su familia. Es el hermano de la Consejera Escolar del Intendente, Ezequiel Galli”, remarcó.
Además se refirieron a las consecuencias de los menores: “De eso no se vuelve, viven traumados toda su vida. En casi todos los casos se hacen pis, se hacen caca” y destacaron la importancia de “contener psicológicamente ni bien se descubren estas cosas” y que los nenes y nenas “no mienten, hay que creerles”.
Y así fueron desencadenándose múltiples casos, con lamentables y escalofriantes coincidencias: menores abusados por pedófilos que caminan por las calles de nuestra ciudad impunemente, sumándose causas que prescribieron y volvieron a abrirse porque los abusos trascendieron las barreras generacionales y la historia se repite.