En el marco del endurecimiento de las medidas de circulación en Olavarría, el decreto 2.566 -al que tuvo acceso Infoeme- dispuso penas económicas para aquellos que organicen reuniones sociales de uno a cien salarios mínimos, y la duplicación para los reincidentes.
El documento que fue firmado por el intendente Ezequiel Galli, el secretario de Salud, Germán Caputo, y la cúpula de su Gabinete incluyó un ítem que habilitó la duplicación del monto a pagar por aquellos infractores que sean reincidentes de las normas sanitarias de prevención de contagios de Covid-19.
Las multas van desde un sueldo mínimo municipal (16.000 pesos) hasta 100. El viernes y sábado pasado, las autoridades policiales recibieron más de 100 denuncias por estos incumplimientos.
En la medida que se detecte este tipo de reuniones, personal municipal realizará la intervención y pedirá los documentos de cada una de las personas que estén en el lugar. Galli puso como ejemplo un asado para diez personas en una vivienda. Se labrará un acta y la multa será para el propietario de la vivienda.
El acta elaborada por los inspectores de Control Urbano será remitida al Juzgado de Faltas que determinará el monto que deberá pagar el infractor en base a la cantidad de gente que había en el lugar y los riesgos sanitarios que se generen.
“La gran mayoría de los contagios, en todo el país, se han dado en reuniones sociales en lugares cerrados donde el virus tiene una capacidad de contagio mucho mayor. Vamos a ser muy severos con las multas. Muy ágiles a las respuestas de las denuncias. Reunión social, asado familiar, festejo de cumpleaños, vamos a ser totalmente severos”, sostuvo el jefe comunal.