Los dos acusados por la desaparición y muerte de Carlos Cordero seguirán detenidos a partir de sendas resoluciones emitidas en las últimas horas por la doctora Fabiana San Román, titular del Juzgado de Garantías Nº 1 de nuestra ciudad.
Según logró conocer Infoeme, en la jornada de este viernes se dispuso, por un lado, la conversión en prisión preventiva de la detención de Claudio Daniel “Chaco” Ibarra Arrieta. En otras palabras, significa que, en caso de no prosperar una apelación en instancias superiores, seguirá detenido como mínimo hasta el juicio.
La medida había sido requerida días atrás por la fiscal de la causa, la doctora María Paula Serrano. Vale recordar que en los últimos días la imputación contra el hombre detenido en la Unidad Penal Nº 38 de Sierra Chica pasó a ser de “homicidio agravado por el empleo de arma de fuego y por su comisión con alevosía”.
Idéntica suerte corrió su pareja, Anabella María José Landalde, con respecto al pedido de excarcelación extraordinaria que había sido presentado desde su defensa. La joven presenta un embarazo de 8 meses de gestación, argumento que fue esgrimido en la requisitoria por la doctora Adriana Hernández, pero todo fue desestimado desde el Juzgado de Garantías.
Vale destacar que Landalde, quien afronta la misma imputación que Ibarra Arrieta pero en calidad de partícipe necesaria, se encuentra detenida en la Unidad Penal Nº 33 de La Plata, una sede carcelaria especializada para mujeres embarazadas.
De manera paralela permanecen las medidas de prueba, con especial atención a lo que sucede en Junín, donde se lleva a cabo la pericia de cotejo de ADN para determinar si efectivamente los restos hallados en el santuario del Gauchito Gil corresponden al ex militar.