Las dos manifestaciones se encontraron, algo previsible por la cercanía horaria de las convocatorias. Cantos de ida y vuelta y distintas opiniones. Infoeme habló con los protagonistas.
Fabiola, trabajadora social indicó que decidió participar de la manifestación a favor de la legalización del aborto porque le parece una política de Estado y pidió “salud pública para todas las mujeres”. Y separó de esta cuestión el pensamiento que tenga cada uno: “si es ético, si es moral, la religión o lo que fuere, pienso que es una decisión personal”.
Agustín, con el pañuelo celeste en el cuello, contó que decidieron convocarse con un grupo de amigos porque están “asustados” por toda “la mafia que hay atrás de la muerte de miles y miles de bebés”.
Indicó que está en contra porque es creyente y se congrega en una Iglesia Evangélica. “Hay una palabra que está escrita en la Biblia y dice Dios te ama y te conoce desde antes que nacieras. La vida de una persona se concibe desde el inicio”.
Un grupo de adolescentes habló con Infoeme y se definieron como feministas que quieren luchar por los derechos de las mujeres.
“Estamos hace años sufriendo el machismo y el patriarcado. Nos merecemos todos estos derechos que nos deben”, afirmó Juliana de 13 años.
Valentina, también de 13, indicó en referencia a la otra manifestación que se desarrollaba a escasos metros que “lo manejamos con tranquilidad, tratamos de abrirle la mente a personas que piensan en contra, pero nunca obligándolos porque cada uno tiene su pensamiento”.
Por su parte, Martina señaló en referencia a la votación en el Senado que “es emocionante, estamos nerviosas porque no se sabe cómo va resultar, esperamos que bien porque el aborto es un derecho que necesitamos para que las mujeres y los cuerpos gestantes ya no mueran más”.
Adriana señaló que decidió participar de la manifestación “A favor de las dos vidas” porque “ defiendo la vida bajo cualquier forma y cualquier contexto, bajo cualquier ideología”. Se definió como “creyente, ciudadana, mamá y docente”.
Natalia se describió como “de otra generación” y admiró la lucha de las más jóvenes: “Es señal que la lucha feminista caló hondo en la sociedad, en las mujeres”. A horas del debate manifestó “muchos nervios” pero destacó que el que se genere este movimiento es un avance: “no hay vuelta atrás”.