En el marco del escándalo generado por la pérdida de 400 dosis de la vacuna contra el Covid-19 que se encontraban albergadas en el Hospital de Oncología “Luciano Fortabat”, el intendente Ezequiel Galli dijo: "Me cuesta pensar en un sabotaje”.
"En principio la falla sólo sería en el lugar donde estarían las vacunas. Se están investigando las cámaras", manifestó el jefe comunal en diálogo con TN, ocasión en la que habló de lo sucedido en el lugar donde se almacenaban las dosis, donde se habrían detectado varias irregularidades, entre ellas un corte en la cámara que monitorea el freezer en que se encontraban almacenadas.
La denuncia, efectuada después de que se detectaran varias irregularidades en el almacenamiento de las dosis de la Sputnik V que finalmente debieron descartarse, quedó asentada en UFI Nº 10, a cargo de la fiscal de turno Viviana Beytía y el fiscal general Marcelo Sobrino. Dentro de este marco, se espera para la mañana de este martes la llegada de Juan Sebastián Riera, el Director Provincial de Hospitales, quien a las 12:15 dará una conferencia intentando esclarecer la situación.
"Me cuesta pensar en un sabotaje, es algo demencial", sostuvo el intendente en una entrevista virtual en la que mostró su desacuerdo con la acusación efectuada por diferentes funcionarios provinciales -entre ellos el director de la Región Sanitaria IX, Ramiro Borzi-.
El intendente se mostró reacio a dar una opinión concreta de lo que pudo haber ocurrido y afirmó no contar “con mucha información”. “Se está hablando de un sabotaje, pero es muy prematuro, se pudo haber roto el freezer durante el fin de semana, pudo haber habido un sabotaje, pero es muy prematuro”, afirmó. .