Servicios como Rapipago y Pago Fácil, cobrarían una comisión a sus clientes por el pago en efectivo de los servicios.
La iniciativa tiene como eje central fomentar el uso de la tarjeta débito como también la reducción de los gastos generados (los bancos le cobran comisión de entre 0,5% y 1% por recibir los depósitos de estas empresas).
Las redes de pago recaudan alrededor de $90 mil millones de pagos y servicios. El dinero debe ser depositado en un banco para luego ser transferido a las 4000 compañías adheridas a su servicio.
Otro punto es que la gran cantidad de billetes en circulación genera un problema en el sistema ya que las entidades bancarias ya no cuentan con espacio para recibir más efectivo.