En horas del mediodía de este domingo, el titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez, confirmó a medios nacionales que la segunda final entre River y Boca por la Copa Libertadores de América fue suspendida.
Plagada de dudas, el encuentro estaba previsto para este domingo a las 17 aunque la situación de salud de Pablo Pérez, tras la agresión de hinchas de River en la previa de la fecha original, daba a pensar que el destino del partido sería el confirmado.
Los incidentes fueron provocados en inmediaciones del Estadio Monumental, cuando un grupo de hinchas arrojaron todo tipo de elementos contra el micro que trasladaba al plantel xeneize.
Según explicaron, la policía en el afán de intervenir en el hecho y alejar a los hinchas, arrojaron gas pimiento en la zona cercana al micro, con jugadores que resultaron intoxicados.
El jugador más perjudicado fue Pablo Pérez, que tuvo una herida ocular producto del estallido de vidrios que se rompieron al momento del cruce.
Todavía no se confirmó cuándo se realizará, y ya se deslizan varias fechas para que el encuentro definitivo de esta superfinal entre River y Boca finalmente se lleve a cabo.