La segunda final de la Copa Libertadores que iba a disputarse en la tarde de este sábado quedó en suspenso, en principio hasta las 18 horas y posteriormente indicaron que se jugaría a las 19.15.
La medida fue anunciada a las por la CONMEBOL y se debió a los serios incidentes que se originaron fuera del estadio Monumental.
El colectivo que trasladaba al plantel de Boca fue atacado, tiraron piedras, latas de cerveza y gas lacrimógeno.
Varios jugadores debieron ser asistidos por médicos y la novedad se dio a conocer tras diversas reuniones que mantuvieron los dirigentes y el presidente de la CONMEBOL.