Salvador Roberto Curzio tenía 51 años y trabajaba como enfermero en una unidad UPA de Los Hornos, un barrio de las afueras de La Plata, tras negarse a la aplicación de la vacuna murió hoy contagiado de Covid-19.
Curzio contrajo la enfermedad en la primera semana de febrero, con el transcurso de los días evolucionó desfavorablemente y en las últimas dos semanas debió ser internado en la unidad de terapia intensiva del Hospital San Juan de Dios, de La Plata. Finalmente, hoy murió.
El médico clínico y compañero del enfermero desde 2015, Guillermo Ramos, expresó que “no se inscribió para vacunarse” y que “justo hoy se terminaban de vacunar las dos personas que quedaban del UPA y se habían demorado en inscribirse”.
Según informó Diarios Bonaerenses, Ramos contó que el enfermero fallecido “era una persona sana, no estaba dentro del grupo de riesgo por algún problema de salud. Sólo era tabaquista y recién el año pasado había empezado a usar los cigarrillos electrónicos”.
El personal del UPA Los Hornos colabora en el proceso de vacunación en el San Juan porque “sabíamos que íbamos a ser una futura sede de vacunación. Lo hacíamos para dar una manos y sumar experiencia”, detalló Ramos.
En ese sentido contó que “de los 100 turnos que se daban por día, sólo iban entre 20 y 30 personas. Esos turnos libres los fuimos ocupando con el personal de salud que no accedía al turno. Por ejemplo, cuando faltaba una quinta persona en el grupo de vacunación, llamábamos y vacunábamos”.
En este contexto señaló que “lo que nos limitó no fue el acceso a la vacuna sino la campaña de desinformación que se hizo que hasta hoy. A Salvador, la semana anterior a que se contagie, le dije que se ponga las pilas pero me dijo quería esperar, que no había muchas explicaciones. Y eso fue por miedo, por la desinformación que se creó. Imagínate que una compañera no quería vacunarse porque pensaba que iba a quedar estéril. Al final se terminó vacunando”.
Finalmente, el profesional y compañero del enfermero fallecido tras estar internado por coronavirus, manifestó que “estamos con mucho dolor. Igual trabajamos. Era una persona muy querida”.