Faltaba una semana para las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias de 2013. Había varias listas, entre ellas la que encabezaba Ernesto Cladera, del Frente Amplio Cívico y Social. Todas las tareas logísticas se desarrollaban en el local histórico de la UCR, ubicado en calle 25 de Mayo entre General Paz y San Martín.
En la madrugada del domingo 4 de agosto, un grupo de personas que no fueron identificadas derribó una puerta trasera y, con las boletas con las que se votaría 7 días después, comenzaron tres focos de incendio que provocaron daños totales en el edificio. La destrucción fue tal, que hubo riesgo concreto de derrumbe.
Esa noche, todo fue dramático. Desde militantes históricos, dirigentes, concejales y hasta el propio Cladera, que en ese momento era candidato, veían como la sede histórica se incendiaba. Desde allí, comenzó una tarea primero por tratar de presentarse de la mejor manera a las elecciones (incluso hubo boletas que se salvaron, quedaron chamuscadas y se utilizaron en las PASO) y desde hace algún tiempo, intentar volver a reconstruir la sede.
Desde la UCR en su cuenta de Facebook, exigieron “a la justicia el esclarecimiento del caso ya que lo ocurrido no fue un simple incendio sino que fue un atentado a la democracia”.
El edificio se demolió parcialmente en 2017, y solo se conservó la fachada histórica. “Con los planos del futuro comité ya diseñados, actualmente se están finalizando los trámites administrativos para dar comienzo a las tareas de construcción” dijeron días atrás. Incluso, Francisco González dialogó con Infoeme días atrás y señaló las complicaciones para reconstruir el lugar: “Está demorando más de lo que quisiéramos” dijo.
“Poder pensar en un nuevo comité, tras el triste episodio sufrido en 2013, fue posible gracias al aporte y trabajo de afiliados, militantes y dirigentes de la Unión Cívica Radical” finalizaron.