En una importante conferencia de prensa realizada en la sede de Suteba, el Frente de Unidad Docente Bonaerense mostró, en casos de docentes, las diversas complicaciones que presentan no sólo por la falta de acuerdo paritario, sino que por la crisis social que afecta al alumnado.
Carolina Demelli, una de las docentes, indicó que la problemática pasa por el sueldo. “En un momento me puse a hacer cuentas como cualquiera en la casa y estuve relacionando lo que pago de alquiler con el sueldo que estoy cobrando. Fui haciendo un pequeño trabajo con el sueldo del 2015, 2016, 2017 y este año, en el mismo mes”.
El resultado, es que en 2015 su sueldo (por dos cargos) era de 19 mil pesos, y un alquiler con cochera le costaba 4.300 pesos mensuales. Repasó como fue creciendo en ese periodo hasta llegar a estos días, donde destacó que “hoy estoy ganando 27.666 pesos, y 12.600 pesos son de alquiler. Lo cual me significa un 45% de mi sueldo”.
Realmente se me hace muy difícil mantener mi forma de vida con dos trabajos, 24 años de antigüedad para pagar el alquiler y la cochera y nada más
A su turno, Miriam Santana dejó en claro que “hoy en día es imprescindible tener dos cargos para sobrevivir, no decimos de cubrir todas las necesidades. Un año, un cargo, un sueldo, alcanzaba para pagar alquiler y servicios. Y lo que pagué la semana pasada es un sueldo y medio en alquiler y servicios. Con el medio sueldo que queda tenemos que comer, vestirnos, sostener una familia”.
Pero además “tenemos que cubrir todas las necesidades que el Estado no cubre. La ropa de trabajo la pagamos, también los materiales de los chicos. En un contexto de inflación permanente, nuestros chicos llegan sin elementos y hasta sin comer”.
Leandro González, otro docente, destacó que “enseñar es mucho más en la Argentina. Es colgar un pizarrón, darle de comer a los chicos, tocar el timbre porque faltó un preceptor y no hay suplente, tener que ir todos los días y ver que una puerta está rota y hacer de cerrajero, soldar los bancos”.
Mario Sánchez, docente de arte, opinó que “se está ignorando al docente como persona sobre todas las cosas. Somos docentes, se hace difícil impartir una buena clase. Todos estos problemas sociales no los sufre sólo el docente, también la familia de nuestros alumnos”.
“Estamos yendo a trabajar con cierto desánimo. No viendo solamente que el dinero no nos alcanza a nosotros, sino que los alumnos padecen y hasta en circunstancias peores que nosotros. Ni que hablar llevar los materiales a clase. Yo que soy de arte tengo un cargo y realmente mi sueldo no es muy agraciado. Se me imposibilita por completo llevar material para todos los alumnos. Lo hacía pero es casi imposible. Antes de ser docentes somos trabajadores, somos personas. Padres” finalizó.