Felipe “Tito” Vera y Stella Maris Castro transitan este aniversario con profundo dolor. Su hija, Magalí Vera, de 34 años, fue víctima de un brutal femicidio. Murió el 1° de diciembre de 2024 luego de que su pareja, Javier Cerfoglio, la golpeara y arrojara el auto con ella dentro al Río Quequén.
El caso conmocionó a Necochea: cámaras del Centro de Operaciones y Monitoreo registraron la agresión y el trayecto del vehículo hasta la orilla del río, donde fue arrojado.
De acuerdo al reporte de Diario Necochea, "desde hacía siete meses y medio los abuelos maternos no veían a su nieto de 13 años. El menor quedó bajo la tutela de sus abuelos paternos y una orden judicial impide que sus abuelos maternos difundan información sobre él".
Según contaron a ese medio, la última vez que lo vieron fue el 17 de abril, cuando el chico pasó por la casa de sus abuelos maternos para buscar pertenencias: "desde ese día sus intentos de contacto quedaron sin respuesta y denunciaron que fueron bloqueados en redes sociales".
El imputado permanece detenido en el penal de Batán, acusado de “homicidio cuádruplemente agravado por vínculo, alevosía, ensañamiento y en un contexto de violencia de género”, una tipificación que representa femicidio.
La causa ya fue elevada a juicio oral. Según fuentes judiciales, el debate se señala para marzo de 2026 ante el Tribunal Criminal Nº 1, luego de que Cerfoglio optara por ser juzgado por magistrados técnicos.
La familia mantiene la búsqueda de justicia acompañada por su dolor cotidiano. La espera de la audiencia final, con la esperanza de una condena, acompaña cada día de este primer aniversario sin Magalí.