La directora de “Talleres Protegidos”, Rosita Muia, junto con otros miembros de la institución, se reunió con el intendente Ezequiel Galli y otros municipales para hablar sobre la apertura del hogar que se inauguró hace tres años.
“Ahora está completamente cerrado. Ya habíamos tenido una reunión justo antes de la pandemia y otra hace unos 10 días. La principal preocupación es ver cómo se van a solventar todos los gastos de personal, mantenimientos y servicios hasta que se pongan en marcha las mutuales de los chicos, de los que tienen mutuales”, explicó.
En ese sentido, la titular de la institución sostuvo que las mutuales comienzan a pagar “después de tres meses de iniciada la actividad”. “Por eso tenemos que ver cómo afrontamos esos gastos”, contó Muia, quien aclaró que “no hay una fecha tentativa de cuándo se podrá poner en marcha el hogar”.
“Es muy difícil, tenemos muchos chicos de riesgo, hay que ser muy cuidadosos”, marcó.
La comisión directiva de la institución ya había tenido oportunidad de reunirse con representantes del municipio para tratar temas relacionados tanto a la reapertura del lugar como también a las estrategias implementadas para solventar sus gastos.
“Tenemos que pensar de qué manera nos vamos a ir preparando para abrir y poner en marcha el hogar. Por supuesto que sabemos que no lo podemos habilitar en pandemia, pero es muy importante que el municipio nos llame a estas reuniones para retomar la charla que veníamos teniendo antes de todo esto”, afirmó Muia, quien contó que una de las estrategias que se barajó fue la de los “padrinazgos”.
“La idea fue de conseguir padrinos para el hogar, generalmente empresas, empresarios que apadrinaran a la institución y que en base a eso después tengan alguna ayuda en los impuesto de carga social, es una posibilidad que estamos todos investigando”, precisó la mujer.