Recientemente se alertó por la seguridad y privacidad de la aplicación para el cambio de rostro que es furor en las redes sociales, denominada Face App.
La aplicación fue creada por el ruso Yaroslav Goncharov y emplea redes neuronales para escanear caras y hacerlas más viejas, jóvenes, agregarles distintos tipos de barbas o incluso cambiarles el género.
Pero no es todo color de rosas, el presidente de la Fundación Australiana de Privacidad, David Vaile aseguró que “el reconocimiento facial se está convirtiendo rápidamente en uno de los elementos clave de la identidad digital y, por lo tanto, las personas deberían considerar la posibilidad de proteger su imagen facial de la misma manera que deberían proteger otros elementos de su identidad, como su fecha de nacimiento, número de contribuyente y demás”.