El Turismo Carretera llegó a Paraná para disputar la décima fecha del campeonato y definir a los 12 protagonistas del Playoff, lejos de esas pretensiones y sin un buen arranque en la clasificación realizada este viernes, Nicolás Pezzucchi mostró su preocupación, se sinceró y dejó en claro que cada vez resulta más difícil mantenerse en la elite del automovilismo deportivo.
En dialogo con el equipo periodístico Puesta a Punto, Nicolás analizó su mal viernes. “Esperábamos ser más competitivos, el auto no cayó bien, con una tendencia grande a ir de trompa que no pudimos mejorar ni en los entrenamientos ni a la hora de clasificar. La verdad que vemos complicado poder mejorar, estamos lejos de las otras Dodge. Primero tenemos que trabajar mucho para arrimarnos a los otros autos de la misma marca, que además tampoco están cerca de la punta (NdeR: la mejor Dodge fue la de Nicolás Trosser, noveno a más de un segundo)”.
“Para mañana tenemos cuatro gomas y esperamos dar el salto, pero no va a alcanzar sólo con el salto de la goma. En los primeros parciales no perdemos tanto, pero de mitad de circuito en adelante perdemos más. La goma te da un plus, pero el problema que tenemos la goma no lo va a solucionar, tenemos que mejorar el auto, no hay goma que te haga bajar dos segundos”, analizó el de Olavarría.
Repasando el año, y recordando todo lo duro que fue en cuanto a resultados, Nicolás fue muy claro: “La realidad es que de todo lo que imaginamos o planificamos a principio de año no pudimos cumplir nada. Un año muy difícil en todo aspecto, y eso te pone muy triste, te bajonea mucho. Soy muy optimista, trato de ir para adelante, pero la verdad que no se cómo vamos a terminar el año, no se que va a pasar, pero por ahora acá estamos, con la cabeza puesta en Paraná, después se verá”.
Por último, agregó: “Estoy muy bajoneado, hasta con ganas de no seguir, es mucho el sacrificio que se hace, mucho lo que se trabaja. Fue un año muy complicado, muy difícil, y uno se plantea un montón de cosas, empieza a priorizar otras cuestiones; y es ahí donde decís, se hace tanto esfuerzo que a veces no se hasta donde vale la pena”, culminó el análisis sincero y preocupado del piloto olavarriense.
Matías Rossi logró en la parte final arrebatarle la pole a Mariano Werner. En el tercer y cuarto lugar quedaron los Torinos de Leonel Pernía y Emiliano Spataro y quinto el mejor Chevrolet de Norberto Fontana.
Los dos golpes de escena de la clasificación se dieron en un mismo cuarto, el de los mejor ubicados en el campeonato. En primera instancia Jonatan Castellano, el líder de la etapa regular, se despistó, generó la interrupción de la tanda y no pudo registrar tiempos. Minutos más tarde, Canapino no pudo mantener su Chevrolet en pista y perdió el control del mismo en la sexta curva del trazado, por lo que no concretó su vuelta esperada y finalizó vigésimo quinto.