Organizado por el Partido Integrar, que tiene como referencia local a Eduardo Braunschweig, el economista Javier Milei y el abogado Mauricio D’Alessandro brindaron una charla en el Club Social local, ante un importante marco de público.
La disertación, que planteaba “La economía argentina de cara al 2019” tuvo una presentación de D’Alessandro, que hasta simuló quemar un billete para señalar que “El Estado es un hijo de p... que quema la plata de los que laburamos todos los días”.
Además, presentaron el Partido Integrar a nivel local, que buscan “que crezca de abajo hacia arriba. Buscamos traer a las ciudades a alguien que den charlas técnicas” y la charla de Milei “pensé que iba a ser una sola pero llevamos cinco. Me enamoré de Milei. Es evangelizar algo que existe y que tenemos. Estamos cansados de pagar 100 impuestos”. De hecho, el concejal tandilense hizo mención al aumento de Tasas locales por decreto por parte del intendente Galli. “Estamos en contra de los aumentos progresivos, de que le saquen a los que le va bien y tirarla sobre sectores desprotegidos. Cada vez son más los que hay que subsidiar. Hay que cambiar esta matriz perversa”.
Y comenzó el juego de acusaciones “cuando uno ve que Gerardo Morales tiene 35 parientes en el gobierno es terrible”. Incluso, admitió que “he sido muy keynesiano. Pero escuchando lo que pasa en todos lados, Milei interpretó lo que explica en palabras técnicas lo que nosotros sentíamos”.
Presentando a Milei, “no nos viene a contar un plan. Viene a contarnos que tiene un sueño. Basándose en el esfuerzo y no en un cheque”.
Milei explicó, tras la presentación de D’alessandro, que “el actual gobierno diagnóstico mal al momento de asumir, tomo malas decisiones, y se dio una piña”. Realizó la charla en dos partes: cómo asumieron, cómo está la macro actualmente en una, y qué pasará en el futuro en la otra. “Si no cambian el rumbo, puede ser mucho peor de lo que parece”.
Señaló que el gobierno debía haber hecho el ajuste ni bien asumió pero “ni siquiera lo mencionó. Está claro porque Marcos Peña tuvo que elegir entre Melconian que pedía ajuste, y el mentiroso chanta de Prat Gay que quería gastar más. Terminamos en el fondo”.
“China crece porque invierte 40 puntos del PBI. El Kirchnerismo se fue con 11 puntos de inversión. Este gobierno lo llevó al 15. Nada, miserable”.
Otro de los pasajes es que “uno de los problemas por los cuales no se invierte es que se ve que todos creen que los empresarios tratan de comprar caro para vender barato. Y es al revés. Si todas las crisis tienen origen fiscal, nadie va a invertir hasta que estalle todo. Ahí sí”.
Mencionó el exceso de impuestos, tasas para tener productos en la calle, y cómo la economía fiscal encarece al empresario, generando falta de inversiones. Y siguió con las repudiables frases tales como “siempre viene un político hijo de mil p… y se lleva la plata y la reparte con los parientes” dando cuenta de casos de nepotismo que no puntualizó, todo fue general.
Señalo la necesidad de realizar un ajuste más duro, tomar medidas vinculadas a la quita de impuestos y, finalmente, dejó un panorama sombrío: “estamos yendo al default, y será en el corto plazo. Si no cambian, el destino es irremediable”.