Un gigante global decidió pisar suelo argentino con una jugada inesperada. BYD, la automotriz china que superó a Tesla en ventas de autos electrificados y se ubicó tercera en el ranking mundial, desembarcó en el país con un esquema de preventa poco común: los clientes deben reservar con USD 500 sin conocer aún el valor final de los vehículos.
El anuncio coincidió con una postal que no pasó desapercibida en el puerto de Zárate: 110 unidades del modelo Yuan Pro eléctrico fueron descargadas para iniciar el proceso de nacionalización. No será un cargamento aislado. En los próximos meses se sumarán embarques que llevarán el total a 7.800 unidades, dentro del cupo de importación de vehículos electrificados autorizado por el Gobierno con arancel cero.
Los primeros modelos confirmados para la Argentina son el Yuan Pro (eléctrico), el Song Pro DM-i (híbrido enchufable) y el Dolphin Mini (eléctrico). Quienes reserven a través de la web oficial recibirán, según la compañía, beneficios adicionales. Las entregas recién se concretarán a partir del tercer trimestre de este año.
BYD trabaja además en el armado de una red de concesionarias exclusivas que tendrá presencia inicial en CABA, Gran Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Mendoza. Será el desembarco formal de una marca que ya está en 102 países y que proyecta ampliar su influencia regional con una planta en Camacarí, Brasil, con capacidad para 170.000 vehículos electrificados anuales.
Detrás de esta expansión se esconde una historia vertiginosa. Fundada en 1994 por el ingeniero Wang Chuanfu en Shenzhen como productora de baterías, BYD ingresó al negocio automotor en 2003 y lanzó su primer modelo en 2005. Tres años después, el respaldo de Warren Buffet como accionista reforzó un camino que en 2024 la llevó a vender casi 4,3 millones de vehículos, por detrás de Toyota y Volkswagen, pero muy por encima de Tesla.
La Argentina es ahora una pieza más en ese tablero global. Con un arranque que desafía las reglas del mercado local, BYD apuesta a que su marca de electrificados despierte curiosidad y convoque a una nueva generación de conductores.