El Gobierno nacional decretó el asueto administrativo para trabajadores estatales, los días 24 y 31 de diciembre. La medida quedó formalizada a través del Decreto 883/2025, firmado por el propio presidente Javier Milei, en la antesala de las fiestas de Navidad y Año Nuevo.
En ese marco, la disposición oficial alcanza a todo el personal estatal nacional, que no deberá cumplir funciones durante ambas jornadas e instruyó a los distintos organismos a garantizar la continuidad de los servicios esenciales, pese al asueto generalizado.
Desde el Ejecutivo libertario, justificaron la decisión en el carácter social y familiar de las celebraciones. Según el decreto, los días 24 y 31, “se encuentran habitualmente destinados a la realización de los preparativos” y a los desplazamientos necesarios para posibilitar el encuentro familiar.
En tanto, la definición presidencial también se apoyó en la Ley 27.399, que establece como feriados nacionales inamovibles al 25 de diciembre y al 1° de enero. En ese marco, el Gobierno consideró oportuno facilitar la organización y el descanso en las vísperas de ambas fechas, sin que la medida implique erogaciones adicionales para el Estado nacional.
Por otro lado, la norma sostuvo que el asueto tendrá un impacto positivo en el turismo interno, al favorecer los desplazamientos dentro del país y el aprovechamiento de los días no laborables. Además, el texto oficial aclaró que la medida no afectará el normal funcionamiento de las instituciones bancarias ni de las entidades financieras, que deberán operar con normalidad.