El desembarco de Santilli se dio en el marco de la aceptación de la renuncia de Lisandro Catalán, hombre que respondía a Guillermo Francos, que tras las elecciones del 26 de octubre dio un paso al costado. Aunque el diputado ya empezó a reunirse con gobernadores, desde este martes estará formalmente al frente del cargo en el que buscará consenso y ser un filtro a los pedidos de fondos de los mandatarios a la Rosada.
Es que Santilli tendrá una cartera ministerial reducida, orientada a no tener otras competencias que no sean la negociación con gobernadores, intendentes y, en parte, legisladores nacionales.
Para ello, el Gobierno suprimió del organigrama de la Presidencia a la Secretaría de Comunicación y Medios, y asignó sus competencias a la Jefatura de Gabinete de Ministros, que ahora lidera Adorni. Lo hizo por intermedio del Decreto 793/2025, publicado en el Boletín Oficial.
A través de esta normativa, establecida “con el objetivo de optimizar y dotar de mayor eficiencia a la gestión de Gobierno Nacional”, el Ejecutivo dispuso otros cambios en la Ley de Ministerios para reconfigurar varias áreas.
En el caso de la supresión de la Secretaría de Comunicación y Medios, que va a tono con lo adelantado por el flamante ministro coordinador, quien dijo que él mismo asumiría esa función como se hizo “históricamente”, se determinó que sus créditos presupuestarios, bienes, personal y unidades organizativas pasarán a la Jefatura de Gabinete. Además, tendrá en sus manos el control formal de los medios públicos (Agencia de Publicidad del Estado, Contenidos Públicos y RTA).
De acuerdo con lo estipulado en el Decreto, “las tareas necesarias para posibilitar la actividad del Presidente de la Nación" serán atendidas a partir de este martes solo por cuatro Secretarías: General; Legal y Técnica; de Inteligencia de Estado; y de Cultura. Según se precisó, las personas a cargo de las tres primeras, Karina Milei, María Ibarzábal y Sergio Neiffert, respectivamente, “tendrán rango y jerarquía de Ministro”.
Más poder para la Jefatura de Gabinete
En paralelo, el decreto redistribuyó competencias entre ministerios. La Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes, que conduce Daniel Scioli, pasó de operar en el Ministerio del Interior a la Jefatura de Gabinete. Es decir, es una atribución más que toma Adorni y una menos que tiene Santilli.
Esta secretaría no es un área de poco peso porque tiene organismos como la Comisión Nacional Antidopaje (CNAD), el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD) y el Instituto Nacional de Promoción Turística (INPROTUR). También tiene a cargo el Fondo Nacional del Turismo.
Finalmente, el Ministerio del Interior también traspasó el control de dos áreas clave que tenía desde hace varios años: el de la Dirección Nacional de Migraciones y el del Registro Nacional de las Personas (RENAPER). Ambas fueron trasladadas al Ministerio de Seguridad Nacional, que hoy en día preside Patricia Bullrich, pero que a partir de diciembre pasará a controlar su segunda, la secretaria de Seguridad Nacional, Alejandra Monteoliva.
El traspaso de Migraciones era un hecho que conocía prácticamente toda la cúpula del Gobierno, pero pocos sabían que también estaba en esas decisiones el RENAPER. Ante la sorpresa, hay quienes dicen, incluso, que podría ser lógico revertir esta decisión. (DIB)