Luego de que Matías Almeyda planteará su voluntad por comprar dosis de la vacuna contra el Covid-19, para los vecinos de la vecina ciudad de Azul, se abrió un intenso debate en las últimas horas. Aunque desde el Gobierno provincial advirtieron que por cuestiones legales “no es posible” que particulares y privados traigan vacunas, al tiempo que aclararon que “nadie” se contactó por el tema.
De acuerdo a lo informado por Diarios Bonaerenses, en una entrevista a Radio Continental, el viceministro de Salud, Nicolas Kreplak explicó que “me parece loable la intención, entiendo que siempre (Matías Almeyda) fue una persona muy generosa pero el problema tiene varias partes: primero, Estados Unidos tiene prohibido la exportación de vacunas por ley. Así que no se puede”.
Además, Kreplak indicó que, el ex jugador no fue el primer personaje público en manifestar la intención de comprar vacunas en forma particular. Pero, señaló que otro de los motivos por los cuales no es posible esa operación está relacionado a que los laboratorios ya tienen comprometida su producción con contratos previos para todo el año.
“Hemos tenido contacto con muchas personas, innumerables personalidades y gente que llega, que dice que puede traer vacunas y ya lo han desmentido los laboratorios”, señaló el viceministro. Y en ese sentido, aclaró: “No hay intermediarios para la compra de vacunas. Y los laboratorios tienen su agenda de ventas, sobre todo los laboratorios occidentales”.
Sobre el debate público que generaron las declaraciones de Almeyda, Kreplak expuso que “creo que más que nada tiene que ver con algún malentendido”, mientras que Carlos Bianco, jefe de Gabinete bonaerense, lamentó que a partir de una “excelente intención” como fue la del deportista “se quiso armar una operación mediática”.
Bianco añadió que la compra de vacunas a través de particulares está prohibida por ley, ya que la normativa nacional (N° 27.573) solo permite que sean el Estado nacional, las provincias y la Ciudad de Buenos Aires los que avancen en ese tipo de negociaciones.
En el artículo 6 de esa norma, donde se habla de que las importaciones de vacunas estarán exentas “del pago de derechos de importación y de todo otro impuesto, gravamen, contribución, tasa o arancel aduanero o portuario, de cualquier naturaleza u origen, incluido el impuesto al valor agregado”, se especifica que “idéntico tratamiento recibirán las vacunas que eventualmente puedan adquirir las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”. De esta forma, la normativa no da lugar a la gestión de intendencias o privados.
Más allá de esa imposibilidad, el jefe de gabinete agregó que “ante una situación así (respecto al caso Almeyda) hay que ver cuál es la procedencia (de las vacunas), eso tiene que pasar por el Anmat y por el Iname (Instituto Nacional de Medicamentos) para ser habilitadas”.
Al mismo tiempo, evocó que todas las vacunas que hay en el mundo no tienen su certificación de manera completa, se encuentran en Fase III y fueron aprobadas para su uso de emergencia por el contexto, “por lo tanto no es lo mismo que comprar cualquier medicamentos en la farmacias”.
Tanto Kreplak como Bianco hablaron sobre el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo bonaerense para que la Provincia tenga sustento jurídico que le permita cerrar contratos para la compra de inmunizaciones. Por el momento, como es de público conocimiento, Axel Kicillof avanzaba en las negociaciones pero era el Estado nacional el que las sellaba.
En esta linea, el viceminsitro de Salud señaló que el proyecto nace ante la necesidad de “adecuar los procesos administrativos de la provincia para la compra en el exterior”, aunque admitió que cerrar contratos no será tarea fácil. “Es muy difícil en este momento porque todos los que tienen producción tienen casi todo vendido”, señaló.
En tanto, Bianco refirió que la Provincia lleva adelante negociaciones con “casi una decena de laboratorios”, aunque indicó que no puede dar detalles de los avances porque hay acuerdos de confidencialidad.