El intendente de Leandro N. Alem, Carlos Ferraris, fue denunciado por el Concejo Deliberante de la ciudad bonaerense porque su esposa había recibido la vacuna. El político del Frente de Todos debió aclarar que su conyugue fue inoculada porque es docente, uno de los grupos priorizados en esta etapa de la vacunación por la vuelta a clases.
En medio de una serie de casos denunciados en diferentes distritos de la provincia y el país de “Vacunación VIP”, Ferraris fue convocado por el Concejo para explicar por qué su esposa, Nadia Aguilar, figuraba en el listado de vacunados pese a no superar la edad de 60 años.
El jefe comunal fue muy duro con aquellas personas que lo acusaron de desviar las dosis de vacunas contra el coronavirus cuando respondió que “aquellos que se dedican a agarrar un papelito y decir ‘vamos a poner a la señora del intendente primero, al intendente segundo, a la familia y al otro’, sacarle una foto y hacerla correr por WhatsApp diciendo que somos los vacunados vip del distrito: Déjenme decir que la señora del intendente se vacunó porque es docente”.
Ferraris explicó que su mujer “hace más de 15 años que es docente y dentro de 20 o 30 días tiene que estar al frente de los cursos dando clases. No se vacunó porque se la dio el intendente, se inscribió como todos los docentes y recibió el turno como corresponde, sin sacarle ventaja a nadie”. Y explamó fastidiado que “es fácil ensuciar a la gente de trabajo”.
Además el alcalde de Leandro N. Alem destacó que aún no se vacunó, como sí lo hicieron otros jefes comunales. “Este intendente se podría haber vacunado primero como el resto. ¿Y qué dijo? No me voy a vacunar porque no soy personal de salud. ¿Qué me pasó?, estuve 15 días en contagio con mi familia”, aseguró.
“Quisiera saber cuántos de la oposición estarían haciendo lo mismo que hicimos, o ya estarían vacunados o ya estarían las vacunas siendo utilizadas por las obras sociales y no público como lo hacemos acá”, ironizó el intendente ante la acusación recibida.