Los dirigidos por Mauricio Pellegrino -que asumió en plena pandemia- siguen una estricta rutina semanal y recientemente se dio a conocer que a las actividades requeridas también suman una clase de pilates semanal.
A cargo de Luciana Ischia, hija de uno de los emblemas de la institución, Lucas Janson y compañía realizan las actividades que se sirve de recursos de gimnasia, traumatología y yoga y une la fuerza muscular con el control mental, la respiración y la relajación.
La profesora de educación física y kinesióloga integra el cuerpo médico de la institución de Liniers y le brinda al plantel un “método de acondicionamiento físico que trabaja tanto el cuerpo, la mente y el espíritu. Se busca que la persona no sólo logre cambios físicos estructurales para mejorar su postura, su alineación, su simetría; sino también mejorar la salud. En alto rendimiento, generalmente decimos que no es salud, ya que lleva a mucho esfuerzo físico y lesiones. Los ayudamos a equilibrarse, mejorar postura y flexibilidad. Es indispensable para ellos y avanzan un montón” sostuvo en diálogo con la prensa del Club.
La idea del flamante entrenador es que con las clases de pilates, los futbolistas eviten futuros dolores y lesiones en el regreso a los entrenamientos.
Fuente: prensa Vélez Sarsfield