En la tarde de este martes, una decena de vecinos realizaron un sorpresivo corte en avenida Emiliozzi y calle 116, en barrio Matadero, para denunciar que transportistas que vendrían de Buenos Aires realizaban la descarga de autopartes “sin protección sanitaria” y que incluso compraban en los comercios del lugar. Tras un acuerdo con el Municipio y la policía por mayores controles, la situación se normalizó.
Los vecinos, que dialogaron con Infoeme, explicaron que “viene gente de Buenos Aires, son camioneros que van a descargar al desarmadero. Como hay tantos casos en Capital tenemos miedo. Se bajan sin barbijo, así nomás. Por eso hicimos la protesta, no tuvimos respuesta y tuvimos que cortar la ruta”.
Detallaron que tras llegar a la ciudad por ruta 226, giran en dirección a barrio Matadero y allí no hay controles, es decir, evitan el control instalado en el inicio de avenida Pringles. “Hay preocupación no sólo de los vecinos del barrio, sino también de las localidades de Sierra Chica, Colonia Hinojo e Hinojo”.
Señalaron que la situación es compleja dado que “se bajan del camión sin barbijo” y “compran en comercios enfrente y hay muchos chicos en el almacén”.
“Si hay un caso de COVID-19 acá, ¿qué hacemos? Nos morimos todos” indicaron.
Tras el corte, personal del Comando de Patrullas, el titular de la Comisaría Primera Nicolás Kette y el subsecretario de Seguridad, Daniel Borra, llegaron al lugar. Del corte total, rápidamente, se modificó para transformarse en un corte parcial hasta tanto haya una respuesta. Minutos después también se hizo presente el secretario de Desarrollo Humano y Calidad de Vida municipal, Diego Robbiani.
“Llegamos a buen término con el Municipio, con el señor Robbiani, Borra, la policía. Hablamos como seres humanos”. Los vecinos confirmaron que “van a hacer más controles, nos dieron sus teléfonos y estaremos en contacto” y que tras llegar a ese acuerdo, levantaron la protesta.
Finalmente, los vecinos de forma más que sentida pidieron disculpas “a quienes tenían que pasar por acá, porque venían del trabajo y le hicimos perder tiempo. Insistimos, mil disculpas”.