La historia vuelve a repetirse, a la par de las preguntas e inquietudes acerca de cómo poder evitar que esto no vuelva a pasar. Las cámaras situadas sobre la rotonda de 112 y autopista “Hermanos Emiliozzi” volvieron a ser el objetivo de un ataque vandálico que se registró en el inicio de la madrugada de este miércoles. Un grupo de adolescentes, según se sospecha, inició un incendio sobre la base de los postes ocasionando importantes consecuencias.
Infoeme dialogó con autoridades municipales y logró conocer que todo se registró en horas de la medianoche y que los principales daños se registraron sobre el semáforo, cual quedó totalmente fuera de servicio. Sobre las cámaras se precisó que aún siguen operativas, que nunca dejaron de estarlo, pero que igualmente se les deben practicar diversas tareas ya que resultó afectada la comunicación con el Centro Monitoreo Municipal.
Para evitar el registro de nuevos incidentes y amenazas, tal cual sucedió meses atrás, ya se iniciaron gestiones y comunicaciones para que personal del Comando de Patrullas acompañe a los operarios. La denuncia, por su parte, fue radicada en la sede de la comisaría Primera y ahora se aguarda por la concreción de distintas medidas de prueba para avanzar sobre los autores.
Vale recordar que la instalación de cámaras en ese punto de la ciudad se logró tras varios meses de gestiones municipales, al punto que debieron realizarse dos licitaciones para poder finalmente llevar a cabo la colocación de los dispositivos de seguridad. Lo concreto es que sólo estuvieron operativos unas pocas semanas, ya que fueron destruidos y vandalizados en mayo del año pasado, en el marco de una protesta que se extendió durante varios días, todo en reclamo por el acceso a distintos beneficios para una persona que se encontraba privada de la libertad. Esas manifestaciones incluyeron varias jornadas de quema de neumáticos y cortes en la circulación. Semanas más tarde, ya en el mes de agosto, el municipio decidió volver a instalar ese equipamiento. El dato no menor es que los operarios y funcionarios que tomaron parte de la instalación de las cámaras fueron amenazados por vecinos del lugar.