Yesica Guevara
@yesicaguevara29
Arrebatando Lágrimas forma parte de la historia reciente de Olavarría. La agrupación carnavalera está presente no sólo en el mes de Dios Momo sino durante todo el año. En manifestaciones o fechas significativas, en celebraciones propias o acompañando a otros artistas, los integrantes multicolores se destacan en la ciudad del cemento.
Ariel Rodríguez hizo un alto en los preparativos del espectáculo para hablar con Infoeme. Desde hace un mes y medio trabajan en la puesta en escena para los carnavales 2019: sin embargo el año que pasó no fue fácil. “Ha sido un año muy intenso, con muchas presentaciones. Sumado a eso, debido a la coyuntura la gente a veces si tiene un tiempito libre en vez de dedicárselo a la agrupación carnavalera se vuelca a trabajar un poco más o intenta rebuscársela de alguna manera ante la situación económica que estamos viviendo”.
Arrebatando es una agrupación popular, integrada principalmente por sectores trabajadores por lo que “la temática elegida para este año tiene que ver con esto que nos está pasando. Tendremos tres personajes alrededor de los cuales se va a desarrollar el espectáculo: el miedo, la lucha y la democracia”, adelantó Ariel.
La murga propone relatos y esta vez no será la excepción: “Vamos a intentar contar una historia que tiene que ver con la imposición y el poder. Y a veces la imposibilidad de elegir a pesar de la supuesta libertad que tenemos”, señaló.
Más allá de la estructura de una murga, con su formato y sus reglas, sus recetas y pasos a seguir, Arrebatando siempre sorprende con sus historias de carnaval que reflejan lo que pasa en el país, en la ciudad, en el barrio.
Para Ariel esto tiene que ver con la necesidad de expresión de los integrantes de la murga. Contó cómo es la dinámica elegida para plantear los espectáculos donde al inicio del trabajo se realiza una ronda de ideas, de propuestas y después van puliendo y seleccionando.
Después de esa primera instancia esas ideas van tomando forma a través de los personajes, del vestuario, de las canciones, de los monólogos y de las propias coreografías.
Tratamos de hacer un arte que intente propiciar el pensamiento crítico, que genere preguntas.
Arrebatando Lágrimas este año cumple 20 años y prometen que esa celebración se va a notar en la pista donde la simbología del estandarte se va a plasmar en las noches de carnaval.
Para darle forma a esas historias los integrantes trabajan hasta la madrugada. Mucho esfuerzo y poco presupuesto, cuentan. Eso no frena la creatividad por lo que Arrebatando para este carnaval reutilizará estructuras y sumará objetos utilizados en otros espectáculos.
“Queremos dar un mensaje de calidad, siempre con mucha humildad. No queremos dejar de estar presentes”, señaló Ariel y agregó que “para las noches de carnaval vamos a estar promediando los cien integrantes más una veintena de colaboradores que sin ellos no podríamos funcionar (aguateros, transporte, vestuario, enfermeros). Un staff importante dada la exigencia del arte que nosotros hacemos”.
Al mirar el camino recorrido la palabra que surge es transformación. “Hemos investigado, aprendido, tomamos talleres y damos talleres también, generamos espacios de formación. Y después están también las individualidades, los compañeros que saben soldar, los que hacen música, artes plásticas, contaduría de la agrupación algo sumamente importante para ver cómo hacemos para que nos alcance la plata o que rinda más”, ejemplificó
“Esperamos siempre al público de esta ciudad tan querida para nosotros y queremos expresarles que nuestra idea es que el arte nos haga pensar, que pueda hacernos disfrutar como es la tarea del carnaval, que sea un momento festivo pero que no pierda la posibilidad de la conciencia, de encontrarnos de una manera alegre”, afirmó Ariel.
El carnaval propicia un espacio de juego, de retorno a la niñez. Para la Mutual de Arte Popular Arrebatando Lágrimas es también el momento para celebrar además de en los Corsos Oficiales es el barrio en el que están insertos.
El Carnaval de Locura se prepara para llegar al barrio Hipólito Yrigoyen el próximo 16 de febrero a partir de las 20:30 en un festejo ideal para el encuentro y el disfrute de manera colectiva. Los organizadores prometen sorpresas y el sorteo de una moto con el objetivo de cumplir el sueño de la murga: “tener nuestras propias paredes”.