Margaritas a cambio de un trabajo voluntario. Un gesto que la institución quiere brindar a las personas que quieran colaborar en la limpieza del predio de la sede de avenida Ituzaingó N° 250.
Allí se encuentra ubicado el edificio del Hogar-Residencia para personas con discapacidad que puede albergar 16 residentes. Fue inaugurado el 6 de octubre de 2017. Aún esperan la habilitación que debe realizar el Ministerio de Salud de la Provincia.
La directora de Talleres Protegidos, Rosita Muia, contó a Infoeme que “ahora se lo ve rodeado de malezas producto de la propia zona y parte de cuando se construyó el edificio. En todo el perímetro hay muchas piedras de todos los tamaños”, explicó.
Esperemos que se sume gente porque lamentablemente el trabajo que hay que hacer es piedra por piedra, explica Rosita. Por tal motivo, señaló que “es necesario juntarlas para que pueda luego entrar una desmalezadora”.
En este sentido, el próximo sábado 22, alrededor de las 15 horas, se instalarán en el predio varios contenedores. De tal forma que todos los voluntarios que asistan puedan colaborar en la limpieza del terreno.
“Pueden llevar el equipo de mate y al final de la tarea, podemos ingresar al Hogar –por ahora sentarnos en el suelo- y al final se llevarán las margaritas que están dando color a buena parte del terreno”, contó Rosita.
El deseo para 2019
“Lo que falta es que vengan del Ministerio de Salud de la Provincia a habilitar el edificio. Hasta que ellos no lo habiliten nosotros no podemos hacer nada”, afirmó Rosita.
Mientras tanto el edificio terminado y con capacidad para alojar a 16 personas espera ser habitado. La obra fue iniciada en marzo de 2016 con dos alas en forma de "L", dependencias adaptadas para discapacidad motora, que permitirá la residencia permanente a personas con discapacidad.
“Está siendo desgastante esta situación. Lo llamo al representante de la región y nos dice que en cualquier momento… pero en cualquier momento ¿cuándo?”, se pregunta la directora de Talleres Protegidos.
Por favor tiene que solucionarse en los primeros meses del 2019. Vos sabés la cantidad de chicos que tenemos en los geriátricos, señaló Muia.
Otra de las preocupaciones que manifestó Rosita, tiene que ver con que no se deteriore el edificio. “Ocasiona gastos nada más porque tuvimos que poner alarma y seguro”, esto después de la rotura de los vidrios del lugar.
“Nuestro sueño es que el Hogar esté en funcionamiento con los chicos adentro”. Es EL deseo, así con mayúsculas, de toda la comunidad de Talleres Protegidos para el 2019.