El yerno de un conocido empresario dedicado a la fabricación de acoplados y semirremolques fue asesinado este viernes a balazos y puñaladas al enfrentarse con dos delincuentes que entraron a robar a su casa de San Antonio de Padua, donde además hirieron de gravedad a su esposa, tras lo cual escaparon en un auto con el apoyo de dos cómplices.
El hombre asesinado fue identificado por los voceros como Esteban Gabriel Izzo (60), dueño de un aserradero de la zona oeste del conurbano y esposo de Silvana Andrea Petinari (56), hija del propietario de la firma "Petinari", dedicada a la fabricación de acoplados, volcadoras y semirremolques, del partido de Merlo, quien resultó gravemente herida en el mismo hecho.
El episodio se produjo pasadas las 4 de esta madrugada, cuando dos delincuentes bajaron de un Volkswagen Gol e ingresaron por un ventanal de la sala que da al frente en el domicilio de la pareja, situado en Italia 1077, de San Antonio de Padua, mientras que al menos dos cómplices los aguardaban a bordo del vehículo.
Según las fuentes, Izzo se despertó al escuchar ruidos y agarró dos armas de su propiedad: una pistola Bersa calibre 40 y un revólver 38 y se dirigió hasta el sector de donde éstos provenían.
En esas circunstancias, se topó con los delincuentes, con quienes mantuvo un enfrentamiento armado y también un forcejeo, al igual que su esposa, que también se trabó en lucha con ellos.
Un vocero judicial dijo que una de las armas que portaba Izzo, la pistola Bersa, se trabó, por lo que sólo accionó el revólver, aunque no llegó a herir a ninguno de los asaltantes.
La misma fuente manifestó que dentro del domicilio hubo corridas y ataques y que en ese marco Izzo recibió al menos cinco impactos de bala y dos puñaladas, mientras que su esposa también resultó con heridas de arma blanca y con un tiro que le produjo la pérdida del ojo izquierdo.
La mujer fue trasladada en grave estado al hospital Eva Perón de Merlo, donde permanecía esta mañana entubada.
En la vivienda también se encontraba la madre de la mujer herida, Elsa Genoveva Otruba de Petinari (83), aunque resultó ilesa ya que no salió de la habitación.
Tras el crimen, los dos delincuentes escaparon en el auto con los cómplices que los esperaban y por el momento no fueron localizados.
Los investigadores descartan que el asalto haya sido al voleo, sino que creen que la banda tenía información acerca de la existencia de dinero en el domicilio.
El titular de la Unidad Funcional de Instrucción 5 de Merlo, Claudio Oviedo, dispuso diversas medidas para dar con los delincuentes, entre ellas el rastreo de las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad de la zona del domicilio y del trayecto que hicieron los delincuentes en su huida, que según testigos fue hacia la zona de Ituzaingó.
En la vivienda trabajaban efectivos de la Policía Científica, quienes levantaban rastros y realizaban los peritajes de rigor, al tiempo que de la evidencia obtenida hasta el momento se estableció que al menos se efectuaron 15 disparos dentro de la casa.