En un emotivo y multitudinario acto llevado a cabo en la institución, la Escuela Técnica N° 2 (ex industrial) firmó la escritura de los terrenos linderos por los que vienen reclamando desde hace décadas. “Ahora empieza otro recorrido, esta lucha es una muestra y una lección lección sobre lo que es la comunidad educativa”, afirmó el jefe de Gabinete de la dirección de Cultura y Educación de la provincia Pablo Uquiza.
Los terrenos habían sido donados en el año 1960 por el propio Municipio al Estado Nacional para la construcción del establecimiento. A partir de allí, la institución está reclamando el dominio sobre dichos terrenos. De acuerdo a lo que expresaron los concejales del Frente de Todos -quienes se encargaron de realizar las gestiones políticas necesarias para la escrituración- en 2022 “una cuadrilla de trabajadores del municipio a órdenes del Secretario de Desarrollo Social Diego Robbiani quitó el alambrado olímpico de los terrenos e intentó apropiárselos”.
El hecho, en su momento, significó la apertura causa penal para determinar a quien pertenecía el inmueble.
En la tarde de este viernes, en un acto en donde estuvieron presentes el jefe de Gabinete de la dirección de Cultura y Educación bonaerense Pablo Uquiza, la concejala del Frente de Todos Mercedes Landívar, la directora de la Asociación de Ingeniería Patricia Domínguez, el diputado provincial César Valicenti, los Presidentes del Centro Educativo, del Centro de Estudiantes, y otros referentes de la comunidad educativa y política.
“Con voluntad política, así llegamos a esto, esto demuestra que cuando la comunidad se organiza, cuando se tiene un objetivo en común, cuando se tienen metas y se trabaja en conjunto, las verdaderas transformaciones se producen. Esto es el resultado de esa organización. Vivimos en una vorágine donde se nos quiere hacer creer que tenemos que hacer de manera individual y no es así, estos son los hechos que lo demuestran”, manifestó Landívar en celebración del hecho.
“Con esto se abre una nueva etapa, hay que seguir apostando a la educación pública, a la defensa de estas instituciones. Queremos mejorar este lugar y hacer que nuestros jóvenes tengan ganas de seguir quedándose en Olavarría”, agregó.
Por su parte, los referentes de la institución también celebraron la escrituración de los terrenos y revindicaron la larga lucha que significó poder lograrlo.
La directora de la institución, Patricia Domínguez, quien calificó la adquisición como “un suceso histórico”.
“Esto es algo de muchísimo valor para toda nuestra comunidad educativa, los actuales y los que han pasado dejando su huella y su corazón en la querida escuela industrial. Hoy, 60 años después de la denuncia de sus terrenos al Estado Nacional, tenemos el privilegio de ser partícipes de la concretización de su escrituración”, declaró Domínguez.
“Este hecho nos emociona y nos llena de satisfacción, nos permite sentirnos completos nuevamente. Es digno de valorar la lucha de estos jóvenes, en particular de quienes integran el Centro de Estudiantes, de los miembros de la Asociación Cooperadora, de exalumnos, docentes, exdocentes, directivos y exdirectivos. Como así también destacar la gestión llevada adelante por el bloque de consejeros para lograr la restitución del predio en el cual nos encontramos”, agregó.
Por su parte, el Jefe de Gabinete de la Dirección de Cultura y Educación Pablo Uquiza también aprovechó la oportunidad para revindicar la lucha tanto de los jóvenes estudiantes como de los diferentes sectores políticos y docentes que gestionaron la escrituración de los terrenos.
“Nada se consigue sin luchar. Estos chicos y estas chicas nos enseñaron que con lucha se puede conseguir aquello que soñamos. La escuela cumple 80 años, está de 1940, cuando Argentina era un país de producción. Ahora nosotros somos herederos de sueños que soñaron otros, y seguramente vendrán otros que cumplirán los sueños que están ahí!, manifestó el funcionario.
Y agregó: “Ahora empieza otro recorrido, esta escuela es mucho mejor que la que tuvimos nosotros, estamos orgullosos de la Escuela Bonaerense”.
“Si no pedimos lo que es nuestro, si no lo protegemos, nos lo van a quitar. Como Centro de Estudiantes nuestro objetivo era lograr algo importante, y este, justamente, es un logro genial”, Emilio Dastugue, el presidente del Centro de Estudiantes.
“Cuando nos enteramos que nos querían sacar los terrenos, empezamos a pensar en cómo solucionarlo. Tuvimos que incluir más gente, gente de Normal, de Rosario, de Hinojo, de Sierra Chica, de escuelas privadas, y eso es lo que más me emocionó. Los chicos de otras escuelas nos ayudaron y se colgaron la bandera de Industrial y salieron a hacer ruido con nosotros”, agregó sobre el recorrido que realizaron para hacer posible la adquisición de los terrenos.