Una mamá olavarriense denunció que su hijo -que padece celiaquía- salió con sus amigos a una cervecería céntrica y como no ofrecían en la carta una opción para su consumo decidió llevarse su propia bebida: primero le impidieron consumir en el lugar y luego lo echaron por sentarse a beber en la vereda lindera.
La denuncia fue realizada en redes sociales y también, según relataron, en los organismos correspondientes.
El hecho tuvo lugar en la noche del jueves, en un local ubicado en Coronel Suárez al 2400, cuando un joven olavarriense salió con su novia y amigos a tomar una cerveza. “Salen y piden todos cerveza y él se llevó su cerveza (porque para el que no sabe no puede consumir cebada) pero si una especial que vienen para los que sufren esta condición”, explicó la madre del joven que tiene celiaquía.
“Hasta ahí, todo bien”, aclaró e indicó que el problema comenzó cuando se acercó la moza para atenderlos: “Toma el pedido y le dice a mi hijo que no puede tener esa cerveza ahí, él le dice que es celiaco y si ellos tienen -esa opción- no tienen ningún inconveniente en sacarla”.
Sin embargo, ante la negativa de la moza, el joven pide hablar con un encargado y se presenta una chica argumentando ser gerente del lugar. “Viene una persona que no tendría más de 20 años diciendo que es la gerenta y que no le permite eso sino se tienen que ir”.
Inmediatamente, el chico decide dejar la botella de cerveza que había llevado en la casa lindera y decide que “cuando quería tomar un sorbo iba y tomaba en la vereda de dicha casa”.
Esta actitud disgustó a la gerencia del lugar que se presentó ante los jóvenes. “La supuesta encargada lo ve o lo estaba espiando y salió al cruce a decirles a los gritos si le estaba tomando el pelo”, expresó la mujer y aclaró: “Todo porque él -su hijo- estaba a cada rato yendo a tomar su cerveza para celiaco”.
“Prepotente, mal educada y mal puesta en ese puesto los echo a todos como perros del lugar, hay testigos, ahora yo como mamá me pregunto”, continuó indignada la mujer.
En este sentido, cuestionó: “Si los bares no están preparados o no tienen productos debidos para una condición así, que cada día es más y más, ¿está bien que maltrate así al pibe exponiéndolo a un momento incómodo?”.
“Quien conozca a Lucas puede dar fe que es un chico respetuoso que él sólo le dijo que no estaba tomando ni siquiera en su vereda y ellos no tenían eso para comprar”, indicó.
Para cerrar planteó: “Como papas estamos mal y se hará la denuncia donde corresponda porque fue una falta de respeto y una forma de discriminarlos también. Siento que está ciudad en vez de incluir excluye y es una vergüenza”.