Pasaron lastimosos 19 años desde el 28 de octubre de 2004, la última vez que Graciela Alderete vio a su hijo Esteban "Mara" Navarro.
En esta fecha tan particular, en diálogo con Infoeme, Graciela renovó "la esperanza de tener justicia, es todo lo que pido".
"Siempre recuerdo a mi hijo, pero la gente no se tiene que olvidar que hay un crimen impune, y hay mucho en Olavarría y nadie hace nada por esas personas", expresó.
Con angustia, Graciela dijo que "esta mochila se lleva para toda la vida y tengo que seguir como sea".
La mujer recordó que en el mes en el que desapareció Mara fue el mismo mes en el que celebraron el último día de la madre juntos. Graciela guarda consigo el regalo que le obsequió: un rosario plateado
"No se que es lo que me de fuerzas, pero sigo de pie; y el único consuelo que tengo es esperar que algún día se haga justicia".