Un olavarriense que se encuentra radicado en Neuquén, fue acusado, junto a sus dos socios, por quedarse con casi 10 millones de pesos que pertenecían a la construcción de edificios que no fueron terminados y tampoco entregados a sus compradores.
Casi una decena de persona denunciaron al olavarriense José Luis Dapello y sus socios Omar Antonio Canale y Fernando Nicolás Silva, quienes estaban a cargo de una desarrolladora en Neuquén por quedarse con su dinero y no terminar las construcciones adquiridas.
En las últimas horas, los socios fueron acusados formalmente por la Fiscalía de Delitos Económicos pero las estafas que sufrieron, hasta el momento nueve personas aunque podrían ser más, fueron dadas a conocer en 2020 cuando el fiscal Marcelo Jara tomaba la causa.
En noviembre del año pasado, tres víctimas relataron sus vivencias y expresaron que iniciaron la compra de departamentos financiados, y a pesar de los reclamos, nunca recibieron lo prometido. Las caras visibles de este negocio, levantaron campamento y no atendieron nunca más los llamados ni emails. Todos los damnificados relataron la misma sensación: “Entregamos todo y hoy no tenemos nada”.
Las propiedades en las que invirtieron los damnificados comprendían la construcción de departamentos sobre Diagonal 9 de Julio, sobre calle Belgrano y en el predio Casonas Morada del Agua de Plottier.
En la jornada de este jueves, finalmente el fiscal del caso dio por oficializado el inicio de la investigación al acusar por estafa en una audiencia a los tres socios fundadores: Omar Antonio Canale, José Luis Dapello y Fernando Nicolás Silva.
Durante la audiencia de formulación de cargos, el fiscal manifestó: “Entendemos que generaron una simulada confianza que llevó a que la maniobra tuviese éxito a partir de una profusa publicidad que se dio en cartelería, medios de comunicación y shoppings, a través de los cuales los denunciantes tomaron contacto con la empresa para adquirir una serie de departamentos que forman parte de un grupo de módulos identificado como Casonas Morada del Agua”.
Jara informó nueve hechos, que ocurrieron en un periodo entre 2012 y 2019, lo cual indicaría que se acordaron nueve transacciones con las víctimas y por la que los acusados recibieron pagos a lo largo de años, aunque las construcciones nunca fueron finalizadas y por lo tanto los inmuebles nunca se entregaron.
En algunos casos, desde la desarrolladora ofrecían una reducción de las cuotas por no poder cumplir con los tiempos de entrega estipulados en el contrato, pero pese a esto continuaron recibiendo pagos hasta 2019 aunque la obra ya estaba frenada.
En los nueve casos, los daños varían de acuerdo a las propiedades que pagaron las víctimas pero las cifras de dinero entregado y perdido van desde los 200 mil pesos hasta los 3 millones. En total el perjuicio es de aproximadamente 10 millones de pesos, aunque el fiscal adelantó que no son las únicas denuncias recepcionadas que se analizan como parte de la investigación.
Jara acusó a los tres socios por el delito de estafa con calificaciones provisorias que podrían variar una vez que cierre la investigación. Canale y Dapello, fueron señalados como coautores, mientras que Silva fue señalado como partícipe necesario. Esto se debe a que, en el transcurso de los años, quedó en evidencia un cambio de roles entre los tres en cuanto al manejo de la desarrolladora.
Al su momento, Norberto López, uno de los defensores, no se opuso a la formulación de cargos; mientras que su colega Martín Rodríguez sí desafió la acusación contra Dapello por no considerarla fundada.
Finalmente, tras escuchar a las partes, la jueza Estefanía Sauli analizó lo presentado por las partes y avaló la formulación de cargos y al igual que el fiscal declaró la causa como compleja.
Fuente: LM Neuquén