A un mes del asesinato de Matías Cabral, un joven azuleño que residía en Olavarría, la fiscal Paula Serrano frente a la UFI N° 4, quien lleva adelante la investigación pidió prisión preventiva para el acusado de asesinar a Cabral.
El diario digital El Tiempo de la vecina localidad de Azul, informó que la jueza Fabiana San Román desde el Juzgado de Garantías 1 perteneciente al Departamento judicial Azul, es quien ahora debe determinar si da lugar o no a la solicitud de la fiscal.
El acusado de este caso fue identificado como Julián Ezequiel Castro de 19 años y actualmente se encuentra detenido en la Unidad 2 de Sierra Chica. Este joven olavarriense se presentó ante la policía un día después de los hechos que dejaron como resultado la muerte del azuleño.
Según detalló El Tiempo de Azul, la fiscal Paula Serrano, considera a Castro, autor de los delitos de homicidio agravado por ser cometido con un arma de fuego y portación de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal.
El hecho
La investigación penal preparatoria cuenta con la versión de dos testigos del hecho. En declaraciones brindadas en sede judicial, ambos, coinciden con que el acuso es autor de los disparos que se efectuaron en el marco de estos acontecimientos.
Uno de los disparos terminó con la vida de Matías Cabral quien resultó ser la única víctima fatal de la noche del 17 de enero. Cabral estaba a pocos días de ser padre fruto de una relación que mantenía con una joven olavarriense que también es testigo de la causa.
En base a las características y lo señalado por testigos el hecho ocurrió alrededor de las tres de la madrugada del pasado domingo 17 de enero en el Barrio 12 de Octubre. Diario El Tiempo, detalló que los hechos inician cuando Julián Ezequiel castro arribó en un automóvil Chevrolet Astra hasta un inmueble del complejo habitacional ubicado sobre calle Mitre.
Allí, el ahora detenido, comenzó a discutir desde su auto con Cabral quien estaba asomado por la ventana en un primer piso del inmueble ubicado en Barrio 12 de Octubre donde el joven se encontraba acompañado por conocidos suyos y familiares de su novia embarazada.
“Qué miras gato…Ahora vengo y te cago a tiros”, cita diario El Tiempo que señalaron los testigos. Después de eso, Castro se retiró, pero instantes más tarde regresó acompañado por dos sujetos y, según indica este diario, desde la intersección de las calles Mitre y 17 efectuó varios disparos. Respecto al arma, la fiscal Serrano sostiene que aquel día el acusado portaba “un arma tipo carabina”.
El presunto homicida disparó al menos siete veces, los primeros dieron en el inmueble donde se encontraba Cabral junto a dos jóvenes más. Esto derivó en que los tres bajaran del primer piso a la calle y ahí resulto herido de muerte Matías Cabral.
"Con el unívoco fin de causar la muerte al nombrado Cabral, utilizando el arma descripta (el encausado) efectuó otro disparo, el cual impactó en el cuerpo de la víctima. Más precisamente en la zona umbilical, provocándole como consecuencia directa de dicha acción una hemorragia interna, ruptura de grandes vasos retroperitoniales y posterior óbito", redactó la fiscal Serrano en el escrito que presentó ayer junto al pedido para que el presunto autor del homicidio se dicte prisión preventiva.
El joven azuleño, luego de resultar herido aquel 17 de enero, fue trasladado en una ambulancia al Hospital Cura de Olavarría donde falleció. El proyectil había ingresado por su zona abdominal afectando varios de sus órganos vitales.
"Actuó con dolo de matar"
Con las pruebas obtenidas, la fiscal Serrano indicó que existen diversos elementos para que se le de prisión preventiva al acusado. Al respecto, la titular de la UFI 4 mencionó que "Castro actuó con dolo de matar, al menos a título eventual, de acuerdo a las declaraciones testimoniales brindadas por los testigos presenciales".
Los testigos apuntaron a que el imputado portaba una carabina con la que disparó en varias oportunidades donde se encontraban junto con Cabral. "Castro cumplió su promesa. Y mediante la utilización de un medio apto para producir el resultado muerte disparó en reiteradas oportunidades -al menos siete- a corta distancia -15 o 20 metros-, aprovechándose de la nocturnidad reinante, para poner fin a la vida del damnificado", indicó la titular de la UFI 4 a cargo de la causa.
Desde el punto de vista de la fiscal, un accionar que fue "evidente" que el presunto autor del asesinato Cabral "se representó la posibilidad de producción del resultado típico y decidió continuar en su acción criminal aceptando el resultado”.