La historia de vecinos que imprimen máscaras para el personal de salud | Infoeme
Viernes 29 de Marzo 2024 - 5:59hs
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Olavarría
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La historia de vecinos que imprimen máscaras para el personal de salud

De manera voluntaria se sumaron a una iniciativa que busca la impresión 3D de mil máscaras que serán utilizadas por personal de salud para luchar contra el coronavirus. La historia de tres vecinos locales que vieron la posibilidad de sumar su granito de arena.

Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.
Actualmente se imprimen máscaras en más de 30 impresoras 3D, todo con la coordinación del Club Social de Innovación.

La solidaridad y sus distintas expresiones ante el Coronavirus. En las últimas horas no sólo el sector político ha dado una muestra de madurez a partir de diversos gestos e iniciativas para pelearle al coronavirus, sino que también la comunidad local con distintos gestos solidarios también ha demostrado estar a la altura. Donaciones, voluntarios y también impresiones 3D.

 

 

En los últimos días una interesante campaña solidaria se gestó desde el denominado Club Social de Innovación, desde donde se llamó a vecinos locales, sean diseñadores profesionales o aficionados, y que cuenten con impresoras 3D en su casa. El objetivo: llegar a mil máscaras para el personal de salud, para que pueda estar protegido contra el Coronavirus.

 

Infoeme logró hablar con tres de ellos, quienes mientras las máquinas hacían lo suyo, narraron a este Diario sus sensaciones y cómo fue que eligieron ser parte. Uno de ellos es el docente e investigador universitario Maximiliano Peret, uno de los impulsores de la iniciativa. Comentó que todo surgió más bien como una intriga personal que llegó a canalizar a través de sus redes sociales para ver qué respuesta tenía, buscando imitar lo que ya sucedía en algunos países de Europa. Allí comenzaron los comentarios, respuestas y grupos de Whatsapp que dieron inicio a todo.

 

 

En pocas horas comenzó el análisis de modelos y bondades de cada uno. Narró que esas pruebas llegaron inclusive al Hospital para elegir la más conveniente con la opinión de los profesionales. “Lo que está bueno de esto es cómo en poco tiempo, con una convocatoria solidaria, logramos trabajar en conjunto y ponernos de acuerdo”, celebró.

 

“Cuando a uno le preguntan si vale la pena la compra de una máquina de este tipo esto es una demostración de que sí. Se pueden hacer cosas que ayudan a la gente, es una satisfacción muy grande colaborar así”, concluyó a medida que relataba que ya estudian planos de respiradores confeccionados “íntegramente en piezas impresas en 3D”.

 

 

Otro de ellos en Nicolás Ronchi, un joven de 21 años, quien desde hace ya un tiempo tiene un emprendimiento en este rubro. Reconoció que se introdujo en esto “como un hobbie”, pero luego todo creció y en el día de hoy cuentan con tres máquinas de estas características.

 

“Nos llegó por varios contactos que estaban necesitando colaboración para imprimir, entonces nos pusimos en contacto. Enviamos el formulario y rápidamente se comunicaron con nosotros contándonos acerca del proyecto, al otro día nos enviaron los filamentos para imprimir”, expresó a medida que relataba que son alrededor de 35 olavarrienses los que forman parte de la iniciativa. “Me pareció importante sumarme al proyecto para mostrar parte de lo útil que puede ser la impresión 3D”, concluyó.

 

 

Similar es lo que cuenta Yanina Troia, una diseñadora industrial olavarriense quien hace ya un tiempo que cuenta también con una impresora de este tipo, además también de un emprendimiento y comercio local. Fue precisamente a través de la persona que le vendió la máquina que surgió el contacto para comenzar a conocer de este tipo de campañas que se repiten en distintos puntos del país. En este caso se trata de máscaras, pero hay otros vinculados con barbijos y respiradores.

 

“Cada uno tiene que hacer 30 máscaras”, relató y explicó que se trata más bien de una suerte de vincha a la que luego se le añadirá un material transparente. “Los pasa a buscar el ejército para que la gente no se mueva de la casa”, continuó.

 

En su testimonio halagó también lo coordinado y organizado del proyecto, algo que también la motivó a ser parte. En pocas horas fue contactada y se le puso a disposición los planos de lo que debía realizar, con todas las indicaciones correspondientes. “Estaba todo bien especificado”, subrayó. “Está bueno ocupar la máquina en estas cosas y ayudar”, finalizó.

 

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