La semana política: la paridad en las encuestas y la recta final | Infoeme
Viernes 19 de Abril 2024 - 21:23hs
18°
Viernes 19 de Abril 2024 - 21:23hs
Olavarría
18°

La semana política: la paridad en las encuestas y la recta final

Galli-Aguilera, Aguilera-Galli, el orden de los factores altera el producto pero la paridad es tal (al menos en los sondeos) que deja un final abierto. La variable Eseverri. El endurecimiento de la campaña de Macri trajo el “Sí, se puede” a Olavarría. ¿Siguió una línea con otras ciudades o adaptó el discurso? Las estrategias del debate que mostraron las líneas de trabajo a 14 días de las elecciones.

Alexis Grierson

@alexisdechillar

 

La recta final tiene mucha tela para cortar, para analizar y pensar de cara a las generales del 27 de octubre. Desde el debate del pasado martes, hasta las encuestas (que hoy tienen fecha límite de publicación en medios) y hasta la visita de Macri y Vidal a Olavarría lanzados de lleno en la campaña con la marcha “Sí se puede” la semana nos trae un sinfín de aristas que mueven la campaña.

 

El debate de ingeniería, en materia política, dejó varios puntos de partidas para el análisis: desde un Aguilera mostrándose fuerte junto a Alberto Fernández y pensando la campaña local, un Galli que no se despegó de Macri y Vidal y buscó por todos los costados hacer pie en la ciudad, sumado, también, a la estrategia 100% localista de Eseverri (con guiños a Kicillof y Fernández), los puntos de coincidencia primaron en las exposiciones.

 

 

Es que a la larga o a la corta, todos piensan en obras públicas, en salir de la crisis con creación de empleo, y obras necesarias y urgentes dada las características de la ciudad, como el Frigorífico. Las estrategias son distintas: algunos más anclados a lo nacional, otros restando importancia a quien gobierne en los demás estamentos dado que “hay que pelear los fondos para la ciudad”, la intención es mirar la ciudad bajo ciertos aspectos fijos.

 

 

 

Como perlitas quedarán dos cuestiones: el curioso intercambio de preguntas entre Galli y Eseverri (donde el ex Intendente le dijo que Kicillof gobernará la Provincia y antes de su respuesta el actual mandatario tuvo que aclarar a que apuesta que Vidal lo hará) y el llamamiento a ser “oposición responsable” de Aguilera a Galli, y la respuesta del Intendente señalando que gane quien gane lo hará él y los demás, tanto Eseverri como Almeida. Todo, entre algunas risas cómplices de los que estaban arriba y abajo del escenario.

 

 

Mientras tanto, los candidatos miden la intención de voto y cómo llegarán a la elección: desde las PASO, que el empate técnico es una constante en los candidatos principales, Galli y Aguilera. Probablemente después del 27 de octubre tanto encuestadores como periodistas tengamos chances de tragarnos nuestras propias palabras, pero es innegable la paridad que mostraron los sondeos de opinión en estos dos meses entre una elección y la otra.

 

Que al fin de cuentas, esta elección es la que vale, la que se juega “por los puntos”: la diferencia nunca pasó del 1,5% entre un candidato y otro. Y, si tenemos en cuenta cuatro sondeos a los que accedió Infoeme en este lapso de tiempo, hay algunos que muestran a Galli arriba, a Aguilera arriba, todas debajo del porcentaje del margen del error, establecido en promedio en el marco del 3%. Un 3% que, como todos ya sabemos, fue la diferencia entre el candidato de Juntos por el Cambio y el Frente de Todos.

 

 

A partir de este punto jugarán las variables claves en la elección: el trabajo del corte de boleta, la “variable Eseverri” de quienes lo votaron y cortaron, la aspiración a la boleta completa, la influencia de los candidatos nacionales en los locales, el balance de lo realizado. Todo estará en juego.

 

 

No es casual, claro, que Macri haya llegado el sábado a afianzar su voto (y ¿empujar? a Galli), así como también Lavagna venga a por los votos de Eseverri, y también la chance, concreta aún, de que Alberto Fernández le dé un empujón a Federico Aguilera.

 

Olavarría gritó “Sí, se puede”

 

 

Macri y su equipo de campaña se pusieron como objetivo visitar 30 ciudades y hacer 30 marchas. Las denominó “la marcha del Sí se puede”. Tras ello, y más allá de la delicada situación económica, Macri y su equipo salieron de gira por todo el país. Hubo resultados positivos (como Capital y Tucumán), negativos (como Bahía Blanca) y mostró una característica interesante que dio cuenta de lo que busca el Presidente.

 

¿Es la gira despedida? No, es la gira apostando el milagroso Balotaje. ¿Cómo lo busca? Apostando a cual grieta se cruce, y parándose de un lado en cada una de ellas.

 

No es casual que se haya mostrado con un discurso más duro, orientando las becas Progresar a carreras con “necesidades empresariales para el futuro”, en contra de la interrupción voluntaria del embarazo (o “a favor de las dos vidas” como se autodenomina ese grupo) y mostrándose enfrente siempre de una posición de las tantas grietas que, a favor o en contra, le sirvió para estar donde está.

 

¿Qué genera este posicionamiento en las grietas? Que algunos decidan votarlo por contrariedad a su principal rival. En el debate por el aborto, por ejemplo, busca que quienes están en contra de la legalización y votaron a Alberto Fernández dejen de acompañarlo por ello. Mismo caso con los votantes de Gómez Centurión, que tuvo un porcentaje que le ayuda a descontar para aspirar al balotaje.

 

 

¿Es para afianzar el núcleo duro de votantes? Claro, también. No son marchas para “convencer” a pesar de que Macri pide que lleven a amigos, familiares, conocidos, vecinos. Son marchas que empujan al convencido a convencer al resto de indecisos.

 

Tiene una clara desventaja: la situación del país. En sondeos de opinión y también en “la calle”, nadie duda de que la responsabilidad de la actual situación es del gobierno de Macri. Además, todos los encuestadores y especialistas dejaron en claro que las marchas “no mueven las agujas” mucho menos a esta altura. La épica de “lo damos vuelta” parece cada vez más lejana sobretodo porque no hay nada que indique que Alberto Fernández baje del 45% de los votos, lo cual le dará la presidencia automáticamente.

 

En todo ese análisis y contexto, Macri estuvo en Olavarría. Allí, quizás no siguió la línea más “dura” en torno a pararse y posicionarse en todas las grietas, aunque sí mantuvo firme el discurso de defender la República, de que entendió a la clase media y que “pagaron el esfuerzo” de la crisis.

 

 

Con Vidal, Michetti y Marcos Peña (entre la gente) el mensaje fue claro: apostar al núcleo duro y al cuerpo a cuerpo con vecinos, amigos, compañeros de trabajo y demás. Lo que termina ratificando la línea de campaña: fortalecer el núcleo duro, convencer a los (a esta altura) pocos indecisos a las vueltas, y buscando llegar al milagroso balotaje de las grietas.

 

Y, claro, apostando a una épica de levantada que lo deposite en el Balotaje. Lo de Vidal, nuevamente, fue mediador, apostando al diálogo. Y, con menos expectativas, aunque nunca, jamás, veremos a un dirigente político flaquear en estos contextos. Más cuando todo el público presente del Paseo Mendía estaba a favor. Por lo cual, la marcha pasó por Olavarría y seguirá su curso por varias ciudades más.

 

La épica peronista

 

 

Este jueves será el Día de la Lealtad. Un día peronista, en otras palabras. En el marco de las elecciones, puede ser una fecha clave. El espacio del Frente de Todos prepara una conmemoración grande, en el gimnasio de un club y con el acompañamiento de mucha gente. En otras palabras, “a lo peronista”.

 

Pero más allá del contenido peronista, la clave estará en dos cuestiones: por un lado, el pedido de empuje en los últimos 10 días de campaña. Por otro, claro, la demostración de unidad del Frente de Todos en Olavarría, que en este tiempo juntó prácticamente a todas las fuerzas peronistas detrás de la candidatura de Aguilera. Todos, más o menos, saben que Aguilera tiene chances de quedarse con la intendencia y que el jefe comunal sea de tinte peronista, algo que no sucede (de manera pura) hace mucho tiempo.

 

Se sigue especulando con la posible presencia de Alberto Fernández, pero desde el espacio, en diálogo con Infoeme, pidieron mucha prudencia sobre el arribo del candidato a presidente al menos en este evento: “siempre es difícil, puede que venga, pero no sabemos si será el 17 de octubre exactamente. Las chances están pero iremos viendo con el transcurrir de estos días” dijeron voces del espacio.

 

 

Debates, encuestas, visitas, idas, vueltas. Todo genera mayor incertidumbre y un final abierto que será, exactamente, en 14 días.

Compartirla

Notas Relacionadas

Deja tu comentario

Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algún comentario violatorio del reglamento será eliminado e inhabilitado para volver a comentar. Enviar un comentario implica la aceptación del Reglamento. Leer más.