La polémica por la renuncia de la secretaria de Desarrollo Social Silvana Rosales por la “detección de irregularidades y uso indebido de los recursos del área” continúa conmocionando y generando repercusiones en diferentes espacios civiles y políticos de la ciudad. Ahora, desde el Polo Obrero exigieron “una investigación independiente” y acusaron al Gobierno Municiopal de “jugando con el hambre y las necesidades de la gente”.
Fue este jueves que la Rosales presentó su renuncia al cargo, lo que significó otro duro golpe para el Gobierno Municipal, más precisamente para el área de Desarrollo Humano y Calidad de Vida -liderada por Diego Robbiani-, ya que se trata del segundo funcionario que renuncia esta semana envuelto en polémica. El primero fue Mariano Ciancio, ex asesor del área, uno de los máximos implicados en la causa por la venta ilegal de terrenos, que presentó su renuncia el martes.
Fue en este marco que el Polo Obrero publicó un duro comunicado en donde atacó al Gobierno Municipal por dichas irregularidades.
“Ellos afirman que la demanda de alimentos en los barrios de Olavarría está cubierta ¿A dónde? Diego Robbiani o alguien de su espacio debería explicar cómo está cubierto, si no para de aumentar la demanda hacia los comedores y merenderos populares. Y deberían explicar, también, por qué se robaron los vales para su propio beneficio. ¿No es que acaso los vales son para personas con problemas de salud?”, se lee en el comunicado.
“Hace un año, Robbiani y Rosales nos dijeron que el monto de la Tarjeta Cabal estaba bien y no tenía por qué aumentar. Al poco tiempo decidieron aumentarlo. Ahora resulta que se estaban guardando la plata de los recursos municipales en sus propios bolsillos. Teníamos razón al exigir que se duplicara su monto”, agregaron.
Aparte de eso, declararon que un mes atrás se acercaron al área para “reclamar por kits escolares y guardapolvos” para los jóvenes beneficiados por el plan y que “la respuesta personal del funcionario fue que ¨lo dejemos analizar la situación¨ y que ¨con algo iban a colaborar¨, pero la directiva real fue negar la asistencia… Todo esto mientras se robaban recursos del Programa Alimentario Municipal”.
Otro de los pedidos que se formularon desde el espacio recayó sobre “la necesidad de que se cree una comisión popular independiente con poder de auditoría” para juzgar la maversación de fondos, ya que, luego de que trascendiera el escándalo, el Gobierno Municipal manifestó que el hecho se iba a juzgar a partir de una auditoria llevada a cabo por la misma Secretaría. No está de más aclarar que el Polo Obrero no fue el único espacio político que pidió que la auditoría sea llevada a cabo por un organismo externo -como el Tribunal de Cuentas de la Provincia, por ejemplo- y no por un organismo dependiente del Gobierno Municipal.
“Nos resulta llamativo que la denuncia salga desde dentro mismo del gobierno municipal, ¿acaso se quiere cortar la cadena de responsabilidades sin que se vea salpicado todo el gobierno de Galli? Robbiani está descalificado para auditar a su propia tropa y mucho menos después del fraude con la venta de terrenos en la que está implicado (por lo menos) quien fuera su colaborador directo, Mariano Ciancio. Estos políticos que prometieron transparencia terminan mostrando la hilacha y malversando los recursos que deberían ir al pueblo”, concluye el comunicado con que los referentes del Polo Obrero hicieron público su repudio.