El pasado viernes, organizaciones sociales de izquierda, cooperativistas y trabajadores precarización habían organizado un “velorio” para el Salario Mínimo, Vital y Móvil. Con un aviso fúnebre en el diario La Nación habían anunciado la actividad.
Este lunes, como ya estaba pautado, se produjo el “entierro” del salario mínimo. El lugar elegido fue el Ministerio de Trabajo ubicado en el centro porteño.
El cortejo fúnebre partió desde la Plaza de Mayo, lugar en el que había sido el “velorio” el viernes pasado. Desde allí, recorrieron las calles porteñas con el ataúd y los arreglos florales a cuestas.
Una vez en el Ministerio de Trabajo de la Nación, echaron tierra sobre el ataúd lleno de flores. Alrededor, colocaron las coronas, para darle más realismo a la situación.
“Los malos diagnósticos y tratamientos ortodoxos, que fueran recetados internacionalmente durante décadas, llevaron al deterioro de su salud de manera crítica”, versa el comunicado lanzado desde la organización. Piden su aumento para hacer frente a la inflación que golpea a la Argentina.
Esta ingeniosa protesta se produce en el marco del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad, el Salario Mínimo, Vital y Móvil. El mismo se lleva a cabo en el Ministerio de Trabajo y su resultado marcará el rumbo de los trabajadores durante los próximos meses.