Un joven "bajo efecto de sustancias", casi en trance, fue asistido el fin de semana pasado luego de que un vecino lo denunciase por tener la música fuerte.
El sábado cerca de las 3:35 de la madrugada personal de Control Urbano arribó a una vivienda ubicada la Avenida Urquiza tras la denuncia y encontró al propietario fuera de sí.
El personal de Seguridad dejó asentado que una vez que llegaron a la casa, después de llamar varias veces “mediante el timbre y golpe de puño en la puerta” nadie les abrió, aunque en ningún momento paró la música, por lo que “en presencia de un testigo ingresaron por el balcón al lugar y corroboraron que el morador se hallaba en el interior recostado”.
Fue en ese momento en el que el personal de Control Urbano intentó despertar al propietario -que, según el acta, “parecía encontrarse bajo efectos de alguna sustancia alucinógena”- para lograr que baje el volumen de la música y, una vez que lo lograron, “invitaron al causante a cesar con el sonido”.
Finalmente, al propietario se le labró un acta por las molestias generadas.