El delantero de Boca Cristian Pavón, que volvió recientemente al club tras su paso por Los Ángeles Galaxy de la Major League Soccer de los Estados Unidos, fue denunciado en Alta Gracia, Córdoba, por abuso sexual.
La denunciante (M. D.), representada por el abogado Fernando Burlando (también defiende en un caso de violencia de género a Daniela Cortés, expareja del delantero colombiano de Boca Juniors Sebastián Villa), difundió la noticia a través de sus redes sociales.
"Lo quiero preso", advirtió la víctima. Además, contó que Federico, el propio hermano de Pavón, estaba al tanto de lo sucedido la noche del 1º de noviembre del 2019 en la localidad de La Bolsa, Córdoba, donde se habría producido el hecho.
"Al ser una bienvenida, supuse que iba a ser una fiesta tranqui, normal. Pero me encontré con una situación totalmente distinta. Una cabaña que se iluminaba sólo con las luces de un parlante, donde ocurrían hechos que para mí no son normales. Relaciones entre chicos y chicas, algunas consentidas y otras no. Yo soy hincha de Boca y Pavón es un jugador al que yo admiraba. Jamás creí que iba a pasar lo que pasó", contó la víctima.
Doyle explicó que concurrió a la fiesta junto a un amigo en común con Pavón. Que luego otro amigo de Pavón le convidó un cigarrillo de marihuana y ella se lo aceptó. Era la primera vez que consumía "estupefacientes" y eso le generó un malestar que la llevó a descompensarse. Mareada, se dirigió hasta el baño y allí entró en escena el futbolista. "Forcejeó la puerta, ingresó al baño y se produjo el acoso. Hay gente que cree que una quiere plata y por eso a una empiezan a difamarla en las redes sociales. Yo no quiero plata ni fama. Yo voy por la detención de Pavón", sentenció la joven.
"Luego del acoso, él se retiró del baño como si nada y me dejó ahí tirada. Me empujó para abusar de mí, me empujó contra el bidet. Sus amistades pensaban que él estaba teniendo relaciones consentidas, ero no fue así. Cristian salió del baño, agarró el parlante y dijo: 'Se terminó la fiesta, vámonos'. Y se fue con sus amigos. Yo lo empujé de bronca, se le cayó el teléfono y se le rompió. Al poco tiempo me enteré que al irse del lugar, les dijo a sus amigos: 'Esta culiada me rompió el teléfono', como si fuera eso lo importante", añadió.
"Pasé un calvario. Quiero explicarle a la sociedad que si me tomé todo este tiempo para denunciar fue porque estaba en una situación de rehabilitación. Había caído en un pozo depresivo, decepcionada totalmente por una situación que había atravesado en una fiesta a la que asistí y en la cual se encontraba Cristian Pavón", relató Marisol.
La joven hace referencia a una fiesta organizada por los amigos de Pavón hace un año y dos meses, tras los primeros seis meses de Kichán como jugador de Los Angeles Galaxy. Según la mujer, el delantero se encontraba de vacaciones en su ciudad natal (Anisacate, a sólo tres kilómetros de La Bolsa) y un grupo de personas, en su mayoría hombres y mujeres de la zona, le dieron la bienvenida en un cabaña.
"Esta persona no se merece estar en el club ya que por sus malos actos deberá responder ante la justicia. ¿Por qué hacen oídos sordos? Hace un año vengo afrontando muchas situaciones y tratando de sanar heridas y haciendo que la Justicia actúe", escribió y acompañó el texto con una foto del delantero.
"¿Qué le pasa al club de quien soy fanática? Deberían tomar medidas... Ya no aguanto más tanta hipocresía... Espero y deseo tengan en cuanta este tipo de actitudes", agregó la denunciante.
"Sólo deseo que la Justicia sea justa. Porque lo que esta persona hizo conmigo no tiene nombre. Un año de sufrimiento, un año para salir adelante, un año para fortalecerme. No voy a tener piedad como vos no la tuviste conmigo", finalizó.
Los abogados que representan a Pavón, sin embargo, salieron a desmentir la denuncia y la calificaron de "falsa".
"La denuncia en contra del señor Pavón es falsa. Por ello, Pavón denunció oportunamente esta situación ante la Fiscalía competente de turno por la supuesta comisión de los delitos de extorsión y falsa denuncia. En esa denuncia, Pavón fue convocado como testigo y aportó todo lo que conocía sobre los hechos por él denunciados", aseguraron los letrados Gabriel y Gerard Gramática Bosch y Débora Ruth Ferrari.
La causa quedó a cargo del fiscal Alejandro Peralta Otonello, de Alta Gracia, provincia de Córdoba.