El doctor Carlos Villamarín, al frente del Juzgado de Garantías N° 2, deberá resolver en las próximas horas si formaliza la detención de un hombre de 61 años, quien fue retenido en la noche del último miércoles en el marco de un allanamiento que tuvo como escenario una vivienda ubicada sobre Corrientes al 3500.
El procedimiento se vio encabezado por agentes de la comisaría Segunda, en el marco de medidas requeridas por el juez de Familia Daniel Morbiducci por una causa judicial por “violencia familiar”. Sin embargo, el tenor de lo hallado motivo no sólo el inicio de actuaciones complementarias, sino también el arribo de integrantes de la cúpula de seguridad local, además de funcionarios de otras dependencias.
Se trató de cerca de 700 gramos de cocaína y bolsas de nylon con marihuana, con un pesaje cercano a los 100 gramos. Fue por ello también que se hizo presente de inmediato en el lugar el doctor Lucas Moyano, al frente de la fiscalía en estupefacientes. Vale recordar que en ese domicilio también se dio el hallazgo y secuestro de armas de fuego, entre ellas dos escopetas y dos revólveres.
En la jornada de este jueves la novedad estuvo dada en que el acusado fue llevado a la sede de justicia local, donde brindó su versión de los hechos ante el fiscal Lucas Moyano, quien lo imputó por los delitos de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y tenencia ilegal de arma de uso civil en concurso real”. Vale destacar que de manera paralela y en el ámbito del Juzgado de Familia avanza la investigación que dio origen al procedimiento.
Ahora resta conocer la postura del juez de Garantías Carlos Villamarín, ante quien el fiscal Lucas Moyano pidió la detención del acusado, que permanece alojado en la sede de la comisaría Segunda.