Rubén Cervino, el ladrón que por un tiempo tuvo a maltraer a la Ciudad con reiterados robos, fue condenado a la pena de cuatro meses de prisión por sustraer un teléfono celular en las oficinas del Hospital Municipal en enero de 2018.
Así lo determinó el Juzgado Correccional 2 de Azul quien encontró a Cervino como responsable del delito de “Hurto simple” en una causa que instruyó la fiscal Susana Alonso.
El “popular” delincuente se encuentra detenido desde enero y podría recibir una mayor condena si se unifican varios delitos que lo tuvieron como protagonista.