El martes 9 de octubre salió la última Nissan Frontier de la fábrica de Santa Isabel, Córdoba, que pertenece a Renault. A lo largo de siete años se produjeron más cien mil unidades de esta pick up de una tonelada de carga que a partir de ahora se fabricarán en México.
Es el final de un proceso iniciado en 2015 que representó una inversión total de 730 millones de dólares costeado completamente por la automotriz japonesa.
Días atrás Renault había comunicado que también se dejaría de producir otra pick up, la Alaskan. La empresa ofreció retiros voluntarios a los 300 operarios que se desempeñaban en esas líneas de producción.