Según datos del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos, entre diciembre y abril, la comercialización de medicamentos de venta libre se desplomó un 35%, mientras que los recetados registraron una baja del 20%.
El descenso en las ventas coincide con un aumento en los precios de los remedios, que se dispararon un 157%, muy por encima de la inflación del período, que fue del 80%. Ante este panorama, el secretario general del sindicato, Marcelo Peretta culpó al Gobierno de este hecho y lo acusó de favorecer la remarcación descontrolada de los laboratorios en detrimento de la población. “Apoyan a los laboratorios al autorizar estas subas, mientras que a las prepagas les ponen límites”, planteó.
En relación al impacto en el bolsillo de los consumidores, el gasto en remedios, que antes de diciembre representaba el 20% del ingreso de los trabajadores activos y el 40% de los jubilados, ahora ascendió al 28% y 50%, respectivamente. “En el caso de los jubilados, si bien es cierto que PAMI cubre el precio de muchos medicamentos, hay muchos otros que no, lo que lleva a escenas lamentables en las farmacias cuando una persona se retira sin poder comprar su medicamento”, indicó Peretta.
Finalmente, destacó que hay entre un 18% y 20% de recetas caídas, una situación que ocurre cuando los pacientes llegan a la farmacia y descubren que no pueden pagar sus medicamentos. “Esto significa que el enfermo deja de tratar su dolencia, algo que en el corto y mediano plazo puede originar una crisis sanitaria”, concluyó.
Con información de Diarios Bonaerenses.