Argentina derrotó a Japón en una final infartante el pasado domingo y por primera vez en la historia se consagró campeón del mundo. En su regreso al país, Juan Cruz Zara se presentó en Estudiantes y contó lo vivido ante un gran marco de público. La prensa se dio cita para reconocer al deportista.
Felicitaciones en cantidad, recuerdos y experiencias del esfuerzo hecho, emoción y familia se reunieron este martes en el restaurante del Parque Guerrero para recibir a uno de los 17 campeones del mundo.
El deportista bahiense estuvo de paso en la ciudad, visitó a su novia Emily Burgos -jugadora del Club Estudiantes- y contó su recorrido en el deporte luego de recibir la invitación de Juan Emilio Incaurgarat para utilizar las instalaciones.
“Me siento un futbolista famoso que lo reciben así y más con la locura de estar en los medios donde siempre está Messi; era un sueño pero nunca se me hubiera ocurrido y es una emoción que haya pasado” comenzó diciendo Juan Cruz ante más de una veintena de personas. Luego contó su recorrido dentro del equipo nacional: “En 2010 tuve mi primera concentración y desde ahí tengo recuerdos fantásticos, desde el campeonato mundial juvenil, los dos mundiales pasados y esto que pasó el domingo que fue fantástico”.
El deportista de 26 años arribó a Argentina con la medalla de oro colgando en su pecho y con la remera del seleccionado nacional puesta destacó que “luchamos mucho por este deporte y para mí más aún que cada 15 o 20 días me toca viajar a Paraná para las concentraciones”.
Recordando el hecho sin parangón para el deporte nacional, uno de los representantes “albicelestes” hizo hincapié en el esfuerzo de él y sus compañeros para logar el objetivo que tuvo varias experiencias previas codeándose con los mejores del mundo: “No vivimos de esto y la satisfacción de lo hecho es enorme”.
“Previo al Mundial de Praga tuvimos una reunión entre todos y ahí comenzamos a perderle el respeto a los otros equipos, porque son jugadores con los que nos enfrentamos durante las temporadas” dijo Zara para agregar: “Fuimos muy fuertes de la cabeza y nos la creímos después de derrotar a Nueva Zelanda en la última fecha de la Zona de Grupos, sabíamos que podíamos pero ahí lo terminamos de confirmar porque le habíamos ganado al último campeón”.
En la previa de lo que será un nuevo viaje en avión, esta vez con destino a Canadá en la antesala de los Juegos Panamericanos de Lima, el bahiense pasó por la ciudad y ante los presente se emocionó hasta las lágrimas al escuchar las palabras de su novia y al recordar a su mamá.
“Hacen e hicieron un esfuerzo muy grande para estar en la cima del mundo y eso me enorgullece porque sé que no es nada fácil y se lo que fue el campeonato porque las comunicaciones después de cada partido era llorar de la emoción por videollamada”, contó la jugadora de Estudiantes y también integrante de la Selección Nacional.
“En el softbol nunca tenés que bajar los brazos, hay que exigirse al máximo, entrenar y disfrutar pero sobre todo disfrutar porque no deja de ser un juego donde se cumplen los sueños” sentenció Juan Cruz Zara, un campeón del mundo que tiene un poquito de su corazón “bataraz”.