En la tarde de este lunes, el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, explicó el mecanismo por el cual se realizaron compras de alimento desde el Estado para el abastecimiento de comedores, y tras las duras críticas por adquirir algunos productos por encima del precio sugerido, incluso más caro que en programa Precios Cuidados.
En este sentido, explicó que “desde el Ministerio de Desarrollo Social convocamos a una licitación para una compra extraordinaria de alimentos ante el aumento de personas que asisten a comedores y merenderos" y que más allá de que “en dos rubros (aceite por 1,5 litro; y azúcar por 1 kg) la oferta superó los precios testigos", se resolvió avanzar igualmente con el proceso "ante la necesidad de llegar a comedores y merenderos".
"Azúcar y aceite sí estuvieron por encima de los precios fijados. Pedimos rebajas y se llegó hasta ahí. No hubo rebaja, pero decidimos igual hacer la compra porque estamos ante una emergencia", precisó Arroyo en diálogo con la agencia de noticias Télam.
De esta forma, Arroyo sentó postura tras los duros cuestionamientos de la oposición por informaciones periodísticas que daban cuenta de la compra de ciertos artículos por un valor por encima de los precios de referencia, tras la publicación de esta compra en el Boletín Oficial.
"Todas las compras fueron realizadas bajo la supervisión de la Sigen, el Instituto Nacional de Alimentación y de acuerdo a las normativas realizadas por el decreto 260/2020 Covid-19", aseveró Arroyo en una serie de tuits emitidos esta tarde.
Otro punto a tener en cuenta es que “ningún rubro se compró a una sola empresa" y detalló que su cartera llevó adelante una licitación y una compra a partir del "aumento de las personas que asisten a los comedores", en el marco de la cuarentena obligatoria dispuesta por la irrupción del coronavirus en el país.
"Compramos leche, azúcar, aceite, arroz, lentejas, fideos, harinas. Ningún rubro se compró a una sola empresa", insistió Arroyo y explicó que, en el caso de los fideos, el precio fijado "es por kilo y no por medio kilo", como consignó una de las resoluciones publicadas, que fue "rectificada después".