Organizado por el Club Cosecha Mundial, Fabricio Oberto llegó a la ciudad y en su despedida brindó una charla sobre liderazgo con un auditorio repleto.
Minutos después de las 19:30 y hasta minutos antes a las 21:00, el campeón de la NBA con los San Antonio Spurs habló de su vida, la responsabilidad de ser un deportista de élite y respondió preguntas a los presentes que colmaron el salón de Cosecha Mundial.
Con imágenes que pasaban a través de un proyector, Oberto cerró su arribo a la ciudad con una interesante charla de liderazgo.
“Mi único gran talento fue entrenar horas y horas durante toda mi carrera” resaltó el deportista que luego hizo un recorrido desde sus comienzos en Las Varillas, el esfuerzo de llegar a Atenas y el trabajo constante que realizó durante su exitosa carrera.
No fue ajeno en la conversación su problema de corazón: “Estaba practicando en San Antonio y me descubrieron una arritmia congénita y los doctores me dieron dos opciones o tomaba pastillas por el resto de mi vida o me daban un shock eléctrico que consiste en apagar y prender el corazón y a mi me lo hicieron 3 veces” contó el cordobés que luego entre risas comentó una anécdota de esa operación y su amigo Ginobilli.
El jugador que estuvo seis temporadas en la élite del básquet mundial siguió su charla entre las preguntas de los presentes y con muchas más anécdotas se despidió de Olavarría, donde brindó una conferencia, entrenó con los chicos y hasta se hizo algunos minutos para recibir una distinción por parte de la Subcomisión de Básquet del Club Estudiantes.